No obstante lo anterior, las lluvias de los últimos días son muy beneficiosas para el campo ya que ahorran algún riego, recargan los acuíferos y limpian los árboles para prevenir posibles enfermedades.
En Utiel-Requena la zona más afectada se encuentra en Requena y su pedanía de El Rebollar y la localidad de Siete Aguas. El ámbito de daño se sitúa en alrededor de 1.000 hectáreas, fundamentalmente de viñedo y algunas parcelas de cereales, almendros y olivos. La incidencia varía según parcelas y podría llegar hasta el 50 por ciento en aquellas más dañadas.
En la comarca de la Serranía el pedrisco no afectó de manera generalizada a todas las poblaciones. Las más afectadas serían Chelva y La Yesa y los cultivos afectados serían también los olivos, almendros, viña y cereales.
El cultivo de la viña se encuentra ahora en unos momentos delicados, a menos de tres meses ya del inicio de la campaña de recolección. Las tormentas de pedrisco han dañado ya tanto la planta como la madera y se unen a las que hace unos días afectaron a Requena y algunas de sus pedanías como Campo Arcís, Los Duques y Albosa.
La Unió insta a los viticultores a realizar tratamientos preventivos para evitar la aparición de enfermedades como el mildiu y el oídio causadas por hongos que se originan por el exceso de humedad de las lluvias.
La Unió