Cultivadas en muchos lugares del mundo, las avellanas se vender normalmente con cáscara, pues así se conservan durante más tiempo. Una vez peladas, las avellanas son muy sabrosas pero si las tuestas adquiere un sabor más dulce y delicado. La piel que recubre las avellanas crudas puede ser un poco amarga. Para eliminarla se deben de colocar en una bandeja al horno durante unos 10 minutos. Estarán listas cuando adquieran un color tostado y la piel se empiece a separar. Entonces con un trapo de cocina limpio y frótalas hasta que separes por completo la piel.
Las avellanas son el fruto seco que más vitamina E contiene, muy beneficiosa para el corazón y otros músculos del cuerpo. También contienen grandes cantidades de ácido linoléico, que juega un papel importante en el desarrollo saludable del organismo.
La empresa de productores especializados en agricultura ecológica Llumastel, vende avellana ecológica. Situados en l’Espluga de Francolí al pié de las montañas de Prades, la zona con escasa pluviometría y fríos invernales, tiene las condiciones y el terreno adecuado para obtener frutos ecológicos de alta calidad.
Una respuesta a «Las avellanas, fuente de vitamina E»