En concreto, el aumento de las exportaciones a países comunitarios (+6,2%) supuso un «impulso importante» para el comercio español de porcino, a pesar de la retracción del consumo y de la demanda a escala mundial, afectada por la crisis.
En cuanto a las exportaciones a países de fuera de la Unión Europea, el Gobierno destacó que, si bien se redujo el volumen enviado a los destinos tradiciones (Rusia, Japón, Corea del Sur, Hong Kong), «se perfilan» nuevos mercados con creciente importancia en los destinos exteriores (China, Brasil, Singapur, Vietnam, Serbia, Liberia, Macedonia).
Estos mercados, según subrayó, fueron «impulsados por la apertura de este comercio en aplicación del Plan de Medidas para la Mejora del Acceso de los Productos Ganaderos a los Mercados Exteriores».
En el primer año de autorización del comercio de productos porcinos españoles con China, el gigante asiático recibió más de 12.500 toneladas de carne y productos del sector, lo que sitúa al porcino como primer sector agroalimentario español en exportaciones a este país.
El departamento de Elena Espinosa detalló asimismo que el porcentaje de la producción española dirigido a mercados exteriores supera al registrado en años anteriores (en torno al 38% de la producción porcina se destinó en 2009 al comercio exterior).
Por su parte, las importaciones totales disminuyeron un 0,1% (descenso particularmente acentuado en las importaciones procedentes de países terceros, que se redujeron en un 15,8%) por lo que la balanza comercial mantiene signo positivo.
Europa Press