Nota de prensa de L’Institut Agrícola Una vez más, la Comisión europea ha hecho caso omiso de las reclamaciones del sector agrario español para rectificar la propuesta de reforma de la OCM del arroz y la presentará sin rectificar, al Consejo de Ministros para su aprobación. Con esta decisión, la Comisión quiere sacarse de encima el problema presupuestario que genera el mantenimiento de los estocs con la eliminación del precio de intervención. Esta actuación tendrá graves consecuencias para el sector productor arrocero catalán y español, dado que dejará al sector totalmente desprotegido ante las bajadas del precio mundial y de la entrada de este producto procedente de otros países libres de aranceles, rompiendo, unilateralmente los acuerdos tomados en la Ronda de Uruguay. L’Institut Agrícola reitera en su crítica que la Comisión Europea no tenga en cuenta las consideraciones presentadas por los principales países europeos productores de arroz i más cuando decisiones de esta magnitud pueden tener unas consecuencias fatales para el futuro de muchas explotaciones de arroz catalanas, españolas y europeas. Esta asociación de empresarios agrarios reitera su negativa de aceptar una propuesta de reforma en la cual no existe ninguna intención de proteger, ayudar y orientar la reestructuración adecuada del sector productor dentro de la UE, sino al contrario, parece aceptar, conscientemente, su desaparición. L’Institut Agrícola no entiende que la Comisión proponga la integración del arroz en el régimen de ayudas de los cultivos herbáceos extensivos, obviando el hecho que, agronómicamente, el arroz es un cultivo muy diferente, y haga efectiva la eliminación del precio de intervención y de todas las acciones que se deriven de ello, dejando sin validez los acuerdos adoptados en la Ronda de Uruguay para fijar el precio máximo de importación a la UE en base al precio de intervención. Las consecuencias de la aprobación definitiva de esta reforma serán totalmente catastróficas para el sector productor en Cataluña, dado que: * El aumento de la ayuda por superficie que se cobrará no compensará, ni mucho menos, la bajada del precio de mercado. Se prevé un aumento de 52’65 a 63 Eur/tonelada, es decir, 1’72 ptas./kg., cantidad que será suficientemente superada por la bajada de precios. * Al integrar el arroz en el régimen de cultivos herbáceos, la Comisión considera que los productores podrán escoger entre el arroz y el resto de cultivos herbáceos, hecho totalmente falso, en la mayoría de las zonas productoras de Cataluña, en los cuales dada su ubicación, no hay alternativa de cultivos. Se puede afirmar que se trata de una oferta cautiva, que no tiene alternativas productivas y que se enfrenta a una demanda casi monopolística. Además, esta supuesta libertad de elección desaparecerá si se regionalizan las producciones dentro de los estados miembros. * Bajada del precio por debajo del coste de producción. Se ha de tener en cuenta que el precio, el pasado mes de diciembre, en la lonja de Chicago era de 20 pts/kg. añadiendo 14 ptas. de portes. El precio internacional ya queda entre 6 y 16 ptas. por debajo de los costes mínimos de producción. * La desaparición de los aranceles, puesto que actualmente el arancel es el 80% del precio de intervención, pero si no hay intervención, consecuentemente, el arancel será 0. * Con la aplicación del sistema de cultivos herbáceos se tendrá que dejar un 10% en barbecho obligatorio. La Comisión considera positivo este hecho, ya que «desaparecerá» del mercado la mitad del arroz que actualmente va a intervención, pero no entra en las dificultades técnicas ni en las repercusiones negativas que puede tener este barbecho sobre el sistema productivo. Además, hay que considerar los compromisos de aplicación de medidas agroambientales que tienen adquiridos los productores de zonas húmedas, que se acuerda por períodos plurianuales. Con la eliminación del precio de intervención se pretende suprimir el sistema de precio límite o precio máximo de importación, pero esto obligará a la UE a abrir negociaciones con EEUU para modificar estos acuerdos o, en su defecto, a aceptar el enfrentamiento que se derive. En definitiva, o habrá sanciones o habrá compensaciones, de forma que la Unión no ganará nada i aún así puede salir debilitada y perjudicada. Esto es especialmente grave si se tiene en cuenta que se quiere desmantelar el sistema de intervención del arroz justamente cuando el mercado mundial lleva cinco años de descenso, y cuando el precio del arroz ha perdido casi una tercera parte de su valor. Este hecho, conjuntamente con la modificación del sistema de importaciones pactado en la Ronda de Uruguay, ha hecho aumentar la presión del arroz para entrar en el mercado de la UE. L’Institut Agrícola no acepta que se abandone el sistema de intervención cuando más falta, cuando justamente por estas inestabilidades en los mercados se idearon los mecanismos de intervención. Por todo esto, l’Institut Agrícola exige a las administraciones que pongan en marcha todos sus recursos – políticos y jurídicos -, en defensa del sector productor del arroz, ante la Unión Europea, para evitar el abandono de esta actividad agrícola en Cataluña y en comunidades autónomas productora. Barcelona, 9 de Junio del 2000 – Institut Agricola
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