Más de 200 avicultores andaluces se han concentrado esta mañana ante las puertas del Matadero Avícola Agrovic, situado en el término municipal de Alcalá de Guadaíra, para paralizar todo tipo de actividad y mostrar su enfado con la actitud mantenida por las empresas integradoras de pollos en estos meses, en los que han incumplido reiteradamente los puntos establecidos en el Acuerdo Marco firmado el pasado 27 de marzo de 2001 entre la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), la Plataforma Avícola Estatal y las propias empresas integradoras, con el beneplácito del Ministerio de Agricultura y Pesca.
Este es el primer acuerdo que se firma en la historia de la avicultura de carne, y supuso un gran paso en el sector, rompiendo con el periodo de más de 30 años de falta de relaciones entre las integradoras y los avicultores. Desde la firma del acuerdo, la organización agraria y la PAE han venido desarrollando un seguimiento del cumplimiento de los puntos recogidos, de los quedan pendientes las siguientes reivindicaciones: la formalización de un contrato-tipo homologado, el establecimiento de un precio mínimo, el suministro de un pienso de calidad, ya que aunque los suministrados hasta el momento tienen todas las garantías sanitarias para un buen consumo pueden, sin embargo, suponer un fraude para los ganaderos por su contenido proteico, y por último, cumplir todas las medidas que permitan la sanidad de los pollitos.
Entre otros puntos del acuerdo están: el pago de medicamentos y carga de pollos al 50%, el pago de vacunas, guías sanitarias y pesaje de báscula al 100%, compensación de IVA al 2%, el establecimiento del Estatuto Sectorial, jubilación anticipada a los 55 años, seguro de asfixia subvencionado para el año 2003, o ayudas para la ampliación y nueva construcción de naves, entre otros.
Las integradoras, después de haber aprobado estos puntos el 13 de febrero en la Comisión de Seguimiento del Acuerdo con la presencia del MAPA para su publicación en el BOE, han dado marcha atrás y se han negado no sólo a firmarlo, sino, lo que es más grave, aseguran que nunca aceptarán el contrato ni tampoco un precio de garantía.
Para los avicultores, este contrato tipo es irrenunciable por considerar que es la única herramienta que da garantía y estabilidad económica. Así pues, ante esta situación, y ante los continuos incumplimientos de las integradoras, se decidió romper las negociaciones con éstas y emprender una serie de actuaciones de protesta como la de esta mañana, realizada a nivel nacional con un total de 2.000 avicultores cerrando mataderos avícolas en las distintas Comunidades Autónomas. De persistir esta situación, las actuaciones de protesta podrían acabar con una Huelga General en todo el Estado.
Durante este año 2002, las pérdidas en Andalucía pueden sobrepasar los siete millones de euros, lo que se traduciría en 7.000 euros por explotación (1,2 millones de pesetas). Las mil explotaciones que existen en Andalucía generan 4.000 empleos directos y más de 10.000 indirectos que, de continuar la situación, se verían en la calle a causa del cierre de las explotaciones. UPA-A ha mostrado su satisfacción por la respuesta obtenida de los avicultores andaluces esta mañana.
UPA-Andalucía