Maritina Hernández, junto con el secretario de Estado del Medio Rural y Agua, Josep Puxeu, y el consejero de Agricultura y Agua, Antonio Cerdá, se reunió el pasado lunes con el viceministro de la Agencia Federal de Supervisión Sanitaria y Fitosanitaria, Sergey A. Dankvert, con el objetivo de fortalecer los lazos comerciales existentes entre la Comunitat y Rusia en cuanto a las exportaciones de cítricos, así como abordar la legislación rusa en cuanto a las condiciones de importación de cítricos y la aplicación de la normativa en materia de límites máximos de residuos establecidos por la Unión Europea.
Asimismo, forman parte de la delegación española responsables de empresas del sector citrícola valenciano, con amplia experiencia en mercados internacionales.
La Consellera ha explicado a las autoridades rusas que en la Comunitat Valenciana “se realizan los más estrictos controles de residuos de plaguicidas para garantizar que nuestras producciones agrícolas cumplen la normativa legal, detectar posibles irregularidades y, en su caso, corregirlas, con el objetivo final de ofrecer las máximas garantías de protección de la salud de los consumidores, tanto españoles como de los países donde se exportan nuestras frutas y hortalizas”.
La Generalitat tiene como objetivo prioritario en la estrategia para ofrecer nuevas oportunidades de negocio al sector citrícola valenciano la consolidación de las exportaciones de cítricos al mercado ruso, que podrían verse afectadas si Rusia decide finalmente aplicar los Límites Máximos de Residuos fitosanitarios (LMRs) que propone.
Maritina Hernández ha explicado que “los LMRs que Rusia pretende aplicar a los cítricos los obtiene extrapolando los que aplica a otros productos vegetales que nada tienen que ver con los cítricos, como son las manzanas, uvas, tomates o cereales, y no de acuerdo a los estándares internacionales establecidos específicamente para los cítricos”.
Los LMRs propuestos por Rusia por extrapolación a los cítricos son mucho más bajos que los establecidos por la UE o por el Codex Alimentarius a nivel internacional, con lo que muchos plaguicidas de uso en campo o almacen, necesarios para el control de determinadas plagas no podrían emplearse.
Sin el uso de los plaguicidas, en las condiciones establecidas por la legislación europea, se puede ver afectada la calidad final del producto que llega al mercado ruso, sin que suponga una mejora en el nivel de seguridad hacia los consumidores.
Generalitat Valenciana