En las cuatro primeras horas de su puesta en funcionamiento, hasta las 12.00 horas, un total de catorce ganaderos de Castlla-La Mancha llamaron para solicitar la retirada de sus explotaciones de los cadáveres de 17 vacas, que han muerto por diversas causas.
De los catorce ganaderos, uno ha llamado desde la provincia de Ciudad Real para la retirada de tres vacas muertas, tres ganaderos han llamado desde la provincia de Guadalajara para la retirada de tres cadáveres y diez ganaderos han solicitado la retirada de once vacas muertas desde la provincia de Toledo.
Las causas de la muerte de estos 17 animales son muy variadas. A modo de ejemplo, citar que una de las vacas murió al caerle encima un tejado que se desprendió debido a los fuertes vientos, otra murió durante el parto de un ternero, otra a consecuencia de una indigestión de bellotas y otra de vejez.
Este servicio está funcionando con toda normalidad, aunque hay que señalar que a primera hora de la mañana, el teléfono de avisos para la recogida de cadáveres se colapsó por la avalancha de llamadas recibidas, tanto desde nuestra región como de otras comunidades autónomas, para solicitar todo tipo de información acerca del mismo.
Dadas las numerosas llamadas que se están recibiendo para solicitar información, la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente quiere recordar que el teléfono estará operativo en horario de 8.00 a 20.00 horas en días laborables (de lunes a sábado) y durante el resto funcionará un contestador automático.
El funcionamiento de este sistema de recogida de cadáveres es el siguiente: La empresa autorizada y contratada por la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente recogerá los cadáveres en un punto accesible de la localidad donde radique la explotación del ganadero, antes de que transcurran 48 horas desde el aviso. La empresa trasladará el cadáver a un centro de transformación que garantice la destrucción de los posibles agentes causales de esta enfermedad (priones).
Los cadáveres se transportarán en los medios adecuados y con la documentación preceptiva, un impreso oficial denominado documento de acompañamiento de material especificado de riesgo, en el que constará, además de otros datos, el número de identificación animal (crotal).
Dentro de los siete días siguientes al fallecimiento del bovino, el ganadero está obligado a comunicar a su correspondiente Oficina Comarcal Agraria (OCA) la baja de dicho animal en su explotación, para proceder a su anotación en la base de datos del sistema del movimiento del ganado nacional (SIMOGAN).
GABINETE DE PRENSA