El consejero de Agricultura y Pesca de Andalucía, Paulino Plata, denunció ayer que los olivareros españoles han sido los más perjudicado de toda la Unión Europea durante el periodo transitorio de la OCM del sector. Ante el Pleno del Parlamento andaluz, el consejero explicó que la OCM de 1998 ha provocado dos tipos de pérdidas: por un lado, las de ayudas, al no recoger la Cantidad Nacional Garantizada (CNG) la realidad productiva española; y, por otro lado, las de mercado, al desaparecer el mecanismo de intervención y caer los precios.
Plata argumentó que la media de producción nacional con derecho a ayuda durante las cuatro últimas campañas se sitúa en un millón de toneladas, con penalizaciones del 24% de la ayuda. En este sentido, afirmó que los olivareros españoles son los que menos apoyo han recibido, ya que mientras que la ayuda media percibida en España durante ese periodo ha sido de 187 pesetas por kilo de aceite, de las 220 pesetas establecidas en la OCM, los productores griegos han recibido 190 pesetas; los italianos 205 pesetas; y los productores franceses y portugueses, la ayuda íntegra.
Por su parte, la eliminación del mecanismo de intervención ha desarticulado el mercado al caer los precios a niveles que muchos olivareros no pueden soportar, indicó el consejero. Así, la caída de precios desde 1996 ha oscilado entre el 35 y el 40%; frente a los precios que se han registrado en Italia, donde el aceite ha alcanzado las 432 pesetas por kilo, casi 100 pesetas más que en España.
Según Plata, la situación de los olivareros para esta campaña es similar, puesto que los datos del primer aforo de cosecha de aceituna y aceite para la campaña 2001-2002 elaborado por la Consejería de Agricultura y Pesca cifra la producción andaluza de aceite de oliva en 913.538 toneladas. Este primer aforo eleva además la producción nacional a la cifra récord de 1.207.129 toneladas de aceite con derecho a ayudas (incluida la aceituna de mesa y el orujo).
Nuevas penalizaciones
Con estas cifras, España superará de nuevo la CNG asignada a nuestro país en la OCM, que se eleva a 760.027 toneladas. Según explicó el consejero, esto supone que la ayuda a la producción de aceite de oliva fijada por la OCM y cuyo importe es de 220,04 pesetas por kilo de aceite se cobrará en torno al 63% de su cuantía y se situará en las 138 pesetas por kilo de aceite. En consecuencia, las penalizaciones para esta campaña podrían rondar el 37% y los productores dejarán de percibir 82 pesetas por kilo de aceite.
La pasada campaña 2000-2001 la producción andaluza se situó en 853.241 toneladas y la producción nacional con derecho a ayudas (incluidos el orujo y la aceituna de mesa) en 1.095.653 toneladas. Con estas cifras, la penalización alcanzó el 31 por ciento del total de la producción (65 pesetas por kilo) y la ayuda quedó fijada en 155 pesetas por kilo de aceite.
El olivar ocupa el 35% de la superficie agraria andaluza y genera el 50% del empleo agrario. En conjunto, agrupa a más de 230.000 olivicultores, 858 almazaras, 55 extractoras de orujo, 44 refinerías y 337 envasadoras. La productividad del olivar andaluz se ha incrementado un 60% en secano y un 50% en el regadío. En los últimos diez años, las exportaciones de aceite se han triplicado, superando las 400.000 toneladas.
Finalmente, el consejero aseguró que Andalucía se juega en este sector el futuro de una gran parte de su economía y del empleo, por lo que indicó que uno de los retos de la presidencia española de la Unión Europea debe ser poner las bases para una reforma coherente y, a ser posible, consensuada con Italia, teniendo en cuenta además que existen datos suficientes que demuestran la realidad productiva andaluza y que gran parte del olivar andaluz está por debajo de los nuevos umbrales de rentabilidad.
Junta de Andalucía