Los primeros viven en las poblaciones más grandes de la provincia, como Mollerussa, Balaguer y Lérida, según el responsable de la contratación de temporeros de Unió de Pagesos.
Coincidió con él el técnico del sindicato agrario JARC, Jordi Vidal. «A una empresa del sector se le han ofrecido los 19 transportistas de una empresa de transporte que va mal», explicó.
El coordinador de Unió de Pagesos en Lérida, Josep Cabré apuntó que este año, como no hay oportunidades en otros sectores, el campo no perderá muchos agricultores a pesar de que los precios agrarios son bajos y las producciones están diezmadas por los efectos climáticos.
El Departamento de Agricultura, Alimentación y Acción Rural (DAR) del Gobierno de Cataluña añadió que algunos hijos de agricultores que habían optado por dejar la explotación familiar están volviendo al sector agrario. «Son pocos, pero empieza a pasar», aseguró el director de los Servicios Territoriales del DAR en Lérida, Joan Godia.
Europa Press