LOS RECIENTES BROTES DE FIEBRE AFTOSA REQUIEREN UNA ACCION INTERNACIONAL URGENTE

«La rápida propagación de una cepa pandémica de fiebre aftosa (FA) demuestra a las claras la capacidad de difusión del virus de FA en vastas áreas geográficas y de provocar epidemias en países que habían estado libres de la enfermedad durante muchos años», afirma la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) en una declaración que se publica hoy.

En algunas partes del mundo, la situación con respecto a la fiebre aftosa ha mejorado substancialmente a lo largo de las dos o tres décadas pasadas, dice la FAO. Norteamérica y América Central, vastas zonas del sur de América Latina, las naciones del Caribe y del Pacífico están libres de la enfermedad como lo estaban hasta hace poco amplias zonas del sur de Africa y Europa.

«Sin embargo, la fiebre aftosa sigue siendo endémica en muchos países de Africa, Oriente Medio, Asia y Sudamérica. La preparación para las emergencias, los planes contingentes y las campañas de información tienen una importancia clave para el control de la FA. Ningún país puede considerarse al seguro del peligro de la enfermedad, debido al aumento del comercio internacional, al turismo, a la circulación de los animales, y de los productos animales y géneros alimentarios.

La Comisión Europea de la FAO para el Control de la Fiebre Aftosa (EUFMD) discutirá de la epidemia reciente e informará a los países del desarrollo y control de la misma durante su próxima reunión que se celebrará en Roma del 21 al 23 de marzo del 2001. La Comisión se fundó en 1954 y cuenta con 33 países miembros. Coordina los programas nacionales contra la FA a nivel continental.

El virus de la FA es uno de los más virulentos, dice la FAO. Es una enfermedad viral muy contagiosa de los animales de pezuñas hendidas. Se caracteriza por la formación de vesículas (pústulas llenas de líquido) y erosiones en la boca, nariz, ubres y pies. Aunque si habitualmente no es letal para los animales adultos, puede provocar la muerte de los animales más jóvenes (lechones, corderos, cabritos, terneras) y ocasionar graves pérdidas a la producción, así como grandes sufrimientos a los animales. La fiebre aftosa raramente afecta a los seres humanos y si lo hace sus consecuencias son de poca entidad.

Existen siete tipos diversos de virus que provocan la FA. El virus descubierto recientemente en Reino Unido se denomina serotipo 0 de la cepa panasiática. Fue identificado por primera vez en el norte de la India en 1990 y se difundió hacia occidente atravesando Arabia Saudí en 1994 para llegar después al Cercano Oriente y a Europa. En 1993 se encontró en Nepal y más tarde en Bangladesh y Bhutan . A finales de 1999 y en el 2000 había llegado a la mayor parte del Sudeste Asiático.

Una demostración del potencial de propagación a larga distancia de las enfermedades epidémicas se produjo el pasado septiembre, cuando el tipo pan-asiático 0 penetró en Sudáfrica. Era la primera vez que esta cepa del virus se detectaba en el continente africano.

Un particular peligro de introducción del virus lo constituye la bazofia (sobras de comidas, cáscaras y pieles de fruta y verduras ) con que se alimentan los cerdos, dice la FAO. Se cree que este sea el origen probable de la penetración del virus en Sudáfrica y también en Reino Unido.

Teniendo el cuenta la amenaza mundial que representa la FA, la FAO sugiere a todos los países expuestos al peligro:

  • Reforzar las medidas de vigilancia mediante campañas de información destinadas a los veterinarios y a las industrias agrícolas y de transportes.
  • Reforzar las medidas de control en las fronteras y sobre todo la posible introducción de FA mediante vehículos, especialmente de transportes que regresan de zonas infectadas y a través de los turistas. Hay folletos informativos de la EUFMD, en la mayor parte de los idiomas del continente europeo a disposición de los viajeros y de las compañías de transporte.
  • Elaborar planes contingentes, que incluyan medidas para la destrucción de los cadáveres de los animales y suministros de vacunas de emergencia como último recurso.

La FAO solicita «controles más estrictos de las importaciones de todos los géneros alimentarios, incluyendo los que transportan los viajeros y de las sobras de comidas de aviones y barcos».

Para erradicar la enfermedad el mejor método es una política de «exterminio total», según la FAO. La vacunación en círculo puede servir de ayuda en el proceso cuando la entidad del brote o el número de animales afectados sea tan considerable que el enfoque de «exterminio total» plantee problemas operativos y de aceptación pública. La erradicación de la enfermedad debería seguir siendo el objetivo. La vacunación no es un substitutivo de la erradicación, dice la FAO. » Aunque se encuentren protegidos contra la FA , los animales vacunados no son completamente inmunes al virus y pueden infectarse y propagarlo. Para mantener la inmunidad hay que vacunar con regularidad a los animales», ,agrega la FAO.

«Para luchar contra la FA y erradicarla en último término es necesario poner a disposición de los países en desarrollo mas asistencia para que puedan atajar la enfermedad en las zonas donde es endémica», subraya la FAO.

La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación ha elaborado un programa multimedia para ayudar a los países a poner a punto mecanismos adecuados para hacer frente a las emergencias en materia de enfermedades animales. El programa denominado Buenas Prácticas en la Gestión de Emergencias (GEMP), se propone ayudar a los países a elaborar planes de contingencia y preparación de emergencias basados en la alerta temprana, la reacción pronta y la adopción de medidas de control para cada enfermedad animal

GABINETE DE PRENSA

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