Remitido por UPA:
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), encabezada por su secretario general, Lorenzo Ramos y el resto de organizaciones agrarias europeas han convocado a miles de productores del sector remolachero-azucarero a una gran manifestación que se realizará en Bruselas, ante la sede de la Comisión Europea, para forzar la retirada de la reforma de la OCM del azúcar que plantea la Comisión Europea y que de ser aprobada supondría el fin del entramado social y económico que sustenta este cultivo en muchas zonas de producción españolas y de otros países comunitarios.
Desde la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) se entiende que el sector más estructurado del campo español considera por unanimidad que la reforma supone la desaparición del cultivo y por lo tanto implica una respuesta enérgica y contundente.
La defensa contra este ataque frontal tiene que basarse en el mantenimiento del frente común creado por el sector agrario y las industrias azucareras, con el establecimiento de actuaciones concretas y coordinadas que se concretan en esta manifestación ante la sede de la Comisión Europea en Bruselas.
UPA se opone frontalmente a la brutal reducción de precios propuesta por la CE y exige que cualquier descenso de los mismos se compense plenamente a través de ayudas directas, por lo que exige el esfuerzo de todas las administraciones, encabezadas por la Ministra de Agricultura, para que realice las gestiones oportunas para evitar que desaparezca una alternativa tan atractiva y rentable, como es el cultivo de la remolacha.
Una reforma del régimen de ayudas en los términos que se plantean supone sin duda una avance hacia la “Desunión Europea”, ya que nos encontramos frente a la primera decisión encaminada a quitar riqueza de unos países para dársela a otros, curiosamente los de mayor renta.
Desde la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos no se entiende que la Unión Europea intente acabar con una de las producciones más rentables y dinamizadores del medio rural, reduciendo hasta los límites más bajos el apoyo al sector, mientras que los competidores más directos en el ámbito mundial mantienen el suyo en niveles mucho mayores. UPA sigue pensando que el mantenimiento de las cuotas junto al establecimiento de un precio remunerador, y la contingentación de las importaciones son elementos fundamentales para la supervivencia del sector.
En el caso de aprobarse finalmente la reforma en los términos planteados por la Comisaria, se puede asegurar que desaparecería el cultivo de la remolacha en un importante número de países de la UE, entre los que sin duda estaría España. En nuestro país tenemos actualmente alrededor de 22.000 cultivadores de remolacha, con una media de 6 hectáreas por cultivador, que entregan su remolacha en 11 fábricas azucareras, generándose en total más de 10.000 puestos de trabajo en el conjunto del sector.
UPA