El Ministerio de Medio Ambiente permite extraer aguas del acuífero del Sinclinal de Calasparra para paliar el déficit de los 76 municipios a los que abastece la Mancomunidad de los Canales de Taibilla, siempre y cuando se adopten todas las cautelas medioambientales que permitan garantizar la recuperación y el uso sostenible de este acuífero.
Así lo establece la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) formulada por el Ministerio de Medio Ambiente, en el que se autoriza la extracción de un mínimo de 78 hectómetros cúbicos de agua y un máximo de 102 en el conjunto de los próximos cuatro años para paliar las carencias que padece el sistema de abastecimiento de la Mancomunidad de los Canales de Taibilla, y que en la zona que corresponde a la cuenca del Segura asciende a 36 hectómetros cúbicos anuales.
En este sentido, la DIA señala que se han tenido en cuenta «las circunstancias concurrentes de extraordinaria y urgente necesidad, puesto que de la no obtención de dichos recursos se derivarían restricciones en el suministro». Esta formulación se acoge a la Ley de Aguas, que permite la explotación conjunta de las aguas superficiales y subterráneas en situaciones excepcionales de escasez.
RESTITUCIÓN DEL CAUDAL DEL SEGURA
La alternativa elegida por el Ministerio de Medio Ambiente para garantizar la viabilidad ambiental del proyecto posibilita la extracción de agua para el abastecimiento de la población y exige, a su vez, la restitución del caudal que aporta al río Segura el manantial del Gorgotón, que deja de fluir cuando los pozos entran en funcionamiento.
De esta forma, los caudales que circulan por el río Segura no se verán afectados por las extracciones y, por lo tanto, se garantizará la conservación del hábitat existente en el entorno de este río.
En este sentido, Medio Ambiente considera que no se produce afección significativa sobre los espacios naturales del entorno, como el Lugar de Interés Comunitario (LIC) de las Sierras y Vega Alta del Segura y Río Benamor; la vegetación de ribera en los tramos más sensibles del río; los ecosistemas de ribera de la Reserva Natural de los Sotos y Bosques de Cañaverosa y el Espacio Natural Protegido del Cañón de los Almadenes; o la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) de la Sierra del Molino, Embalse del Quipar y Llano del Capitán.
Asimismo, para garantizar la recuperación y uso sostenible del acuífero de Calasparra y del propio manantial del Gorgotón, la Declaración de Impacto Ambiental establece amplios periodos de inactividad de los pozos, más largos que las campañas de extracción. Gracias a esta medida, al final de cada periodo de descanso se logrará la práctica recuperación del acuífero y volverá a fluir el agua en el manantial del Gorgotón.
Junto a estas garantías, Medio Ambiente establece una serie de medidas protectoras y correctoras, como el establecimiento de un programa de vigilancia ambiental; el control constante del nivel del acuífero en los periodos de extracción y en los periodos de descanso; o el seguimiento de la calidad ambiental del paraje del Gorgotón y la evolución de su ecosistema.
FUNCIONAMIENTO DEL SINCLINAL
El proyecto consiste en la extracción de agua subterránea del acuífero del Sinclinal de Calasparra a través de los pozos de la Confederación Hidrográfica del Segura ubicados en ambas márgenes del río Segura, en el tramo comprendido entre la localidad de Calasparra y el embalse de la Rambla del Cárcavo, en la zona de Sierra del Molino y Almacenes.
Los volúmenes de agua subterránea extraídos son vertidos al cauce del río Segura, que actúa como conducción natural, para hacerlos llegar, a través de los canales del Postrasvase Tajo-Segura, a las tomas que alimentan a las plantas potabilizadoras de la Mancomunidad de los Canales del Taibilla, organismo dependiente del Ministerio de Medio Ambiente encargado de abastecer a 76 municipios del sureste español.
MMA