Domingo Berriel recordó que con la firma de este acuerdo comenzó el pasado año una nueva era en la apuesta del planeta por un verdadero desarrollo sostenible
El consejero de Medio Ambiente y Ordenación Territorial del Gobierno de Canarias, Domingo Berriel, en el marco de la celebración del Primer Aniversario del Protocolo de Kioto, ha mostrado su satisfacción por la entrada en vigor de este acuerdo, que tuvo lugar el pasado 16 de febrero del año 2005.
El Protocolo de Kioto es un acuerdo jurídicamente vinculante cuyo objetivo es que, en el período 2008-2012, los países industrializados reduzcan sus emisiones colectivas de gases que causan el efecto invernadero, lo que está provocando el aumento de la temperatura del planeta.
Para el consejero de Medio Ambiente, la entrada en vigor del Protocolo el pasado año representó ¿un acontecimiento de extraordinaria importancia para nuestro futuro puesto que se trata de un decisivo paso hacia adelante en la lucha contra el calentamiento del planeta, ya que contiene objetivos obligatorios y cuantificados de limitación y reducción de gases de efecto invernadero
Domingo Berriel recordó igualmente que con esta medida se refuerza la concienciación pública, a escala mundial, de los problemas relacionados con el cambio climático, ¿un problema global al que nos enfrentamos, y que a mi juicio es el que más puede deteriorar las condiciones de habitabilidad del planeta y requiere permanentes esfuerzos en los diferentes sectores de la sociedad¿.
Para Berriel ¿el cambio climático obliga a realizar permanentes esfuerzos en los diferentes sectores de la sociedad: es un problema que nos incumbe a todos y sus efectos se manifiestan en numerosos aspectos¿. Algunos de sus efectos, como la desertificación y la desertización, ¿requieren en Canarias que se realice un doble esfuerzo en la implantación de los sistemas adecuados de gestión eficiente de las aguas, ya que tiene que recurrir a sistemas de producción a partir de recursos energéticos fósiles, lo que, sin duda, evitará el derroche de recursos energéticos y por lo tanto contribuirá de manera importante a la lucha contra el cambio climático¿.
El consejero autonómico, además, indicó que hace un año ¿por primera vez en la historia de la humanidad se acordaron objetivos y compromisos que implican un decrecimiento del consumo y recursos naturales en las actividades económicas que afectan a la esencia del modelo productivo en la industria, el transporte, la energía y los servicios¿, e insistió en que ¿se trata de una cuestión que afecta a toda la humanidad¿. Asimismo recordó que, con la entrada en vigor de este acuerdo, comenzó el pasado año una nueva era en la apuesta del planeta por un verdadero desarrollo sostenible, de cara a propiciar una real reducción de gases de efecto invernadero.
En este sentido, señaló que el departamento autonómico que dirige ha elaborado un Inventario de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero, del que se desprende que es el sector energético el principal causante de las emisiones de estos gases, ya que representa un 90,5 por ciento del peso total de los sectores causantes de estas emisiones, habiendo experimentado un aumento del 27 por ciento en los últimos doce años. Otros sectores como el de la Industria han experimentado un aumento de estas emisiones espectacular (un 933,6 por ciento con respecto a 1990), pero siguen suponiendo sólo el 1,2 por ciento del peso total.
Berriel considera que ¿el aumento de las emisiones en Canarias de gases de efecto invernadero se debe a su gran crecimiento económico y, muy singularmente, al extraordinario incremento de la población que han experimentado las Islas en los últimos años, que viene generando una gran demanda eléctrica¿. Sin embargo, hizo hincapié en que ¿a pesar de algunos datos alarmistas, la emisión de gases de efecto invernadero en Canarias se ha equilibrado en los últimos dos años¿, y recordó que desde el Gobierno canario ¿se ha apostado decididamente por intensificar las energías alternativas, con las campañas y acciones encaminadas a fomentar el ahorro energético como otros mecanismos para contribuir al esfuerzo mundial sobre la lucha contra el cambio climático¿, y al uso de combustibles ligeros como el gas para disminuir la producción de CO2 y otros gases de efecto invernadero.
Si bien es cierto que el Protocolo fue suscrito el 11 de diciembre de 1997 en la ciudad japonesa de Kioto, tuvieron que pasar ocho años para que entrara en vigor, dado que el mismo tenía que ser ratificado por los países industrializados causantes del 55% de las emisiones de estos gases, objetivo que se cumplió una vez que Rusia ratificara el Protocolo
MMA CANARIAS