El Instituto para la Sostenibilidad de los Recursos ha creado, en colaboración con el despacho D&C Abogados, la Corte de Arbitraje Ambiental, una alternativa a los procedimientos judiciales ordinarios para conciliar y dictar resoluciones en los conflictos ambientales.
La presentación tuvo lugar el pasado jueves en el Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla a cargo de Eduardo Lizarraga Dorda, secretario general del Instituto para la Sostenibilidad de los Recursos, Eduardo Arenas Bocanegra y Borja Llanza Primo de Rivera, secretarios jurídicos de la Corte y pertenecientes al despacho D&C Abogados.
Durante el acto explicaron que la Corte Arbitral es un equivalente de los Tribunales de Justicia por el que las partes pueden obtener los mismos objetivos que si acudieran ante la jurisdicción civil, ya que el laudo es de obligado cumplimiento y tiene validez de sentencia judicial. No obstante, las ventajas de conciliar o resolver los conflictos ambientales ante esta Corte Arbitral son mucho mayores; el más destacado sería la especialización ambiental de los árbitros, escogidos entre profesionales de gran experiencia, que conocen bien la realidad del ámbito ambiental, lo cual conlleva una rapidez en su tramitación.
De hecho, la resolución de los conflictos se reduce por imperativo legal, salvo acuerdo de las partes, a seis meses, lo que agiliza su eficacia. Asimismo, esta rapidez en la obtención de la resolución implica una reducción de gastos, cuyo coste está establecido por los Aranceles de la Corte de Arbitraje. Por otro lado, todos los procesos son confidenciales, evitándose con ello el daño a la imagen pública de las partes.
Por su parte, los árbitros serán elegidos entre los Catedráticos, Técnicos y Licenciados en Derecho de mayor prestigio en materia ambiental en principio, en toda la Península Ibérica, que se regirán por los Estatutos, el Reglamento y los Aranceles de la Corte, como garantía de imparcialidad.
La finalidad de solucionar controversias ambientales, es tanto que no se genere un daño, como reparar lo antes posible el daño causado al medio ambiente. Por ello la conciliación y el arbitraje ambiental, se convierten por su rapidez, agilidad y eficacia, en la solución más idónea para la protección y restauración del ambiente.
El Instituto para la Sostenibilidad de los Recursos se creó en 1993 y en 2002 se constituyó en fundación. Entre los miembros integrantes de su patronato está el Ministerio de Medio Ambiente, la práctica totalidad de las Consejerías de Medio Ambiente de las Comunidades Autónomas y un gran número de empresas privadas preocupadas por el sector medioambiental
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