Por otra parte, se ha iniciado la recogida del pimiento del piquillo, aunque en principio las expectativas son poco halagüeñas. En cambio, el arroz y el maíz son los cultivos menos afectados por las inclemencias climáticas. En el caso del arroz se esperan unos buenos resultados, al igual que en el del maíz, que puede ser objeto de algún daño por parte de la araña roja. A todo ello hay que añadir que se presenta esperanzador el desarrollo del cultivo de la aceituna para aceite, salvo en algunas zonas de la margen derecha del Ebro. Se da la circunstancia de que las aguas registradas a la salida del invierno y en la primavera constituyeron una reserva importante para los olivos, que han soportado bien el verano. Las últimas precipitaciones harán engordar el fruto, con los consiguientes buenos resultados.
A causa de la climatología se han perdido entre 10 y 12 días de plantación de las crucíferas, sobre todo del bróculi.
El informe del Departamento señala, además, que en las zonas de montaña los pastos ven impulsado su desarrollo vegetativo, muy disminuido durante el verano por los efectos de las altas temperaturas. De hecho, se observan rebrotes que, si acompañan las temperaturas, se convertirán en un buen aprovechamiento a diente para el ganado ovino y bovino. Los secanos han recibido muy bien las pasadas aguas por lo que los agricultores realizan labores de alzada y preparan las tierras para las siembras del otoño.
En la zona de Tierra Estella está finalizando la recogida de la patata de consumo tardía, con unos rendimientos bastante buenos en peso, aunque los ejemplares son menudos de tamaño. Han resultado pobres los rendimientos de la alubia para pocha en Murieta, al igual que en la zona correspondiente de Sangüesa. En Marañón y Genevilla se procede a la «quema» de las partes aéreas, de modo que se prevé la recolección de la patata para siembra para la próxima semana. Finalmente, en esta zona va muy avanzado el corte y colgado de las plantas de tabaco, con una cosecha muy aceptable.
Gob. navarra