Ante el caso de EET descubierto por un panel de científicos europeos en una cabra sacrificada en Francia en 2002, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación señala que hasta la fecha los laboratorios de referencia españoles no han comunicado ningún hallazgo que induzca a pensar que la EET está presente en nuestra cabaña caprina.
No obstante, inmediatamente se ha reforzado la vigilancia en este aspecto, tal como obliga la última disposición comunitaria que ha sido publicada este mes, el Reglamento(CE) 36/2005.
Las medidas aplicadas hasta la fecha en España son las mismas que en el resto de la Unión Europea, aprobadas en sus órganos de decisión y respaldadas por los dictámenes científicos de la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) que incorporan las últimas evidencias y descubrimientos científicos en este campo.
La Comisión Europea ha indicado que estas medidas de precaución y seguridad garantizan un alto nivel de protección y que, en consecuencia, el riesgo para los consumidores es mínimo. Con todo, la Comisión ha propuesto intensificar los tests de investigación con objeto de determinar si se trata de un caso aislado.
Asimismo, se recuerda que desde enero de 2001 existe una prohibición total de alimentar a los rumiantes con harina de carne y hueso.
Para más información, consultar la web del MAPA ( sección Novedades), la web de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y la web de la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria.
Mapa