Además, Oceana solicitará a UNESCO que la industria petrolífera sea incluida en la lista de amenazas que pesan sobre el Parque Nacional de Doñana, aún no considerada como tal a pesar de su relevancia. Los recientes accidentes originados en la monoboya de descarga de la Refinería La Rábida de Cepsa en el último mes y medio deben ser tomados como un aviso de lo que podría suceder tanto a los ecosistemas terrestres y marinos del Parque Nacional como a otros espacios naturales costeros cercanos de España y Portugal. La UNESCO declaró en 1980 al Parque Nacional de Doñana Reserva de la Biosfera y en 1994 Patrimonio Natural de la Humanidad, por sus excepcionales valores naturales.
“El gobierno español debe reforzar su apoyo a las energías limpias y renovables, como la eólica marina, entre otras, en vez de seguir fomentando el avance de la industria petrolífera, que tanto daño puede causar al medio ambiente costero y marino. El entorno de Doñana ya se encuentra muy amenazado por esta actividad como para que se apoye e incremente aún más su presencia en la zona”, declara Xavier Pastor, Director Ejecutivo de Oceana en Europa.
En diciembre de 2008 los Estados Miembros de la UE alcanzaron un acuerdo, con carácter vinculante, por el que el Consejo Europeo se comprometía a que las energías renovables participaran con un 20% en el consumo total de la UE en el año 2020, para de esta forma poder luchar con las crecientes emisiones de gases efecto invernadero y sus impactos en el clima terrestre. En la actualidad, España no genera ningún megawatio de origen marino, siendo necesario por tanto un definitivo impulso al sector en los próximos años. Desde Oceana se aboga por el desarrollo sostenible mediante el impulso al sector eólico offshore, siempre y cuando se desarrolle de forma controlada y cada uno de los proyectos autorizados supere los respectivos estudios de impacto ambiental.
OCEANA