Argentina, apoyada por países como Chile, Costa Rica, Ecuador o Brasil expusieron que los países importadores anuncian arbitrariamente nuevos Límites Máximos de Residuos de pesticidas en los alimentos más restrictivos que los establecidos en las normas internacionales o que no habían sido contemplados en estas normas, lo que dificulta el comercio internacional. Por ello solicitaron que se unifiquen las normas internacionales relacionadas con residuos de pesticidas y que la aplicación de estas normas esté justificada por evidencias científicas.
Argentina expuso también las dificultades que suponen para la producción y el comercio las múltiples normativas existentes sobre este tema y argumentó que de las 345 pesticidas registrados en su país, sólo el 32% coincide en sus niveles máximos con lo establecido en el Codex.
Pidieron también una actitud más activa de los organismos internacionales con capacidad para desarrollar normas como el Codex.
Los países desarrollos y subdesarrollados apuntaron también que otra de las dificultades para el comercio es la proliferación en los países comunitarios de las normas privadas en el sector, como la de Eurep-Gap, ISO, etcétera. Estos países se quejaron además de que los límites de LMR que se fijan en estas normas no están basados en parámetros científicos y algunos calificaron estas normas de «poco transparentes» porque no son notificada antes las autoridades competentes de la Organización Mundial de Comercio.
Fepex