La recolección mecanizada del tomate, la fecha óptima de recolección del arroz, las medidas de control frente a insectos vectores de virus en horticultura de invierno y la trufa en las zonas pirenaicas constituyen cuatro proyectos de investigación, que desarrolla el Instituto Técnico y de Gestión Agrícola (ITGA) juntamente con otras entidades, y a los que el Departamento de Agricultura, Ganadería y Alimentación aporta este año 8.350 euros. Con esta cantidad se complementa la financiación que realiza la Comisión Interministerial de Ciencia y Tecnología (CICYT) para los tres primeros proyectos, y la Comunidad de Trabajo de los Pirineos, para el último.
De los proyectos mencionados, uno hace referencia a la recolección mecanizada del tomate y su finalidad consiste en el estudio de los daños mecánicos producidos en la recogida, para conseguir un aumento de la calidad de la materia prima que se elabore. Se trata, en este caso, de comprobar los daños mecánicos sobre el citado cultivo para uso industrial de las variedades, en las condiciones utilizadas en el valle del Ebro, con especial dedicación al tomate entero pelado. Todo ello lleva consigo el establecimiento de unos criterios que permitan rechazar aquellas prácticas de recolección que produzcan unos niveles de daños superiores a los niveles máximos fijados por la empresa receptora para la obtención de un producto sano y de calidad, así como el estudio del efecto de las condiciones de realización de las operaciones de recolección, teniendo en cuenta en el funcionamiento de las máquinas la velocidad de avance, los sacudidores, los puntos de trasvase, etc…
En el caso del proyecto correspondiente al arroz, se pretende la elaboración de un modelo de previsión de la fecha óptima de recolección en función de la fecha de aparición de las panículas en las variedades con mayor superficie de cultivo.
Los productos hortícolas centrarán la investigación.
Otro de los proyectos se centra en la identificación de los insectos vectores de virus en los principales cultivos hortícolas de invierno, y en determinar la dinámica poblacional y posibles artrópodos útiles aplicables a programas de control biológico. En este ámbito, se persigue concretar las principales virosis transmitidas en Madrid, Murcia y Navarra.
Finalmente, el cuarto de los proyectos trata de crear en las zonas pirenaicas una red interregional de plantaciones de encina, quejigo y roble micorrizadas con trufa negra. Todo ello lleva consigo observaciones sobre la preparación y laboreo del terreno, fertilizantes, sistema de riego y de poda y entubado de plantas y acolchado. Este proyecto comprende, igualmente, aspectos relativos a un catálogo de contaminantes de las plantaciones truferas, la relación entre el micelio de la fruta y las raíces de las plantas adventicias presentes en los «quemados» y los aromas de los cuerpos fructíferos de la trufa negra.
Gob. Navarra