Aunque faltan todavía elementos de juicio para hacer una valoración más ajustada, ASAJA Aragón se ha tomado un tiempo prudencial para valorar los tremendos perjuicios ocasionados por las inundaciones del río Ebro a su paso por Aragón, con la consideración de que los daños persisten dado que la evacuación de las aguas, no se ha hecho en su totalidad y en algunas zonas fundamentalmente dedicadas a la agricultura los daños se harán patentes por mucho tiempo.
Los servicios técnicos de ASAJA Aragón señalan que las filtraciones y la elevación de la capa freática, aguas del subsuelo, seguirán impidiendo la entrada a los campos, por lo que también hay que considerar como pérdida el lucro cesante, es decir, que pedimos que se indemnice a los agricultores y ganaderos por aquellas cosechas que no van a poder producir por culpa de esta situación.
ASAJA ha inventariado los daños en el sector agrario dañado por la riada y encuentra una conclusión desoladora. Esteban Andrés, secretario regional señala que “la afección es multimillonaria, al destruir tanto los cultivos, como el valor agronómico de muchas fincas, y la posibilidad de retomar la inminente campaña de siembras y riegos en las explotaciones de toda la ribera”.
Se encuentran importantes daños en instalaciones de riegos y servicios a las fincas: canales de transporte, desagües, drenajes, lindes… En las edificaciones agrarias, granjas, parideras, almacenes, maquinaria y utillajes. Graves han sido también los daños en las infraestructuras rurales como caminos ó desagües. Todo un entramado de comunicaciones y sistemas de riegos y evacuación de aguas que en muchos términos, como es el caso de las huertas de La Almozara en Zaragoza, databa de la presencia árabe en esas fértiles tierras .
Desde ASAJA Aragón se hace hincapié en que “Es preciso, no solamente reconstruir las motas destruidas, sino que habrá que pensar en dar garantías a futuro a toda la población ribereña y consolidar definitivamente unas defensas solventes que eviten todas las calamidades vividas y que de ninguna forma puedan repetirse”.
Otro apartado a considerar dentro de las inversiones es el estado del cauce, lecho y riberas del Ebro. La presión de los ecologistas a los que ASAJA Aragón critica duramente, ha impedido la limpieza de los lechos con la extracción ordenada y sin impactos de las gravas, la limpieza de islotes y vegetación que ocupan los cauces y desvían las aguas hacia los campos y poblaciones.
A juicio de ASAJA, mención especial y alarma causa ver cómo a un agricultor se le impide hacer cualquier limpieza de vegetación, o reforzar las motas……, y sin embargo como es al caso de la Autopista A-68, cruza La Almozara impunemente, por encima del río, obstaculizando el paso de las aguas y en caso de inundación elevando el nivel de la misma.
Lo destruido es mucho y la reconstrucción ha de hacerse para evitar definitivamente situaciones como las vividas en Pradilla de Ebro o Cabañas donde el riesgo para los municipios y sus habitantes ha sido real.
Asaja Aragón