El Consorcio Agropecuario de Segovia –participado al 50% por Caja Segovia y Diputación de Segovia-, que gestionará la obtención de la Marca de Calidad, ha promovido y apoyado desde el comienzo la creación de la Asociación.
Así lo explicaron el pasado miércoles 28, los miembros de la asociación pertenecientes a municipios de las provincias de Valladolid y Segovia y cuyo objetivo es poner en valor el ‘ajo de Vallelado’, una variedad autóctona de reconocidas cualidades, frente a importaciones de otros países.
Los productores presentaron la pasada semana la iniciativa junto a representantes de las diputaciones de Segovia y Valladolid, cuyos responsables de Agricultura, José Martín Sancho y Máximo Gómez, respectivamente, expresaron su confianza en la apuesta y en la necesidad de contar con un marchamo propio para esta hortaliza de la que se podrían beneficiar muchos productores de ambas provincias.
En rueda de prensa, el presidente de la Asociación para la Promoción del Ajo de Vallelado, Óscar Cuéllar Cuéllar, destacó que el principal problema a que se enfrenta el sector es la competencia que suponen las importaciones de otros países como China, Estados Unidos y, últimamente, Francia, es por esto, que se ha ido reduciendo el número de productores de ajo en la zona.
El presidente, entiende, que la forma de recuperar el sector es haciendo valer una diferenciación del ajo autóctono frente a los de importación y, esto, solamente se puede llevar a cabo a través de la marca de garantía “Ajo de Vallelado”.
De acuerdo con los datos con los que actualmente trabaja la Asociación, la zona de producción para la Marca, comprendería 30 localidades, de las que el 60 por ciento se encuentran en el sur de Valladolid, y 20 en Segovia, en la zona noroeste, en torno a la localidad de Vallelado, cuyo nombre sirve para la denominación. En total se cultivan aproximadamente unas 200 hectáreas con una producción media de 10.000 kilos por hectárea y que suele obtener un precio en origen de 1,20 a 1,30 euros por kilo, según señalaron.
«El elemento diferenciador de este ajo se consigue sólo aquí gracias a la edafología y climatología», agregó Ana María Escorial, jefa de la sección de Agricultura del Consorcio Agropecuario de Segovia, ya que en la zona se registran las más duras condiciones de las regiones ajeras, con oscilaciones de temperatura entre 15 grados bajo cero hasta los 40 grados positivos en verano.
La calidad del producto es tal que incluso acuden a Vallelado compradores procedentes de otras zonas españolas donde se comercializan con cierto renombre, tal como aseguraron miembros de la nueva asociación. Además se quejaron de las «tremendas variaciones» del precio que se producen de un año a otro. Por ello esperan que con el nuevo reconocimiento se consiga una estabilidad en las cotizaciones y la mejora en el valor que reciben los productores.
En opinión del presidente de la asociación, el ajo de Vallelado “debería tener un valor económico más elevado” para que se haga atractiva su comercialización. De este modo se evitaría el abandono del cultivo que se ha producido en los últimos años y que se añade al de otros productos de la zona como el de la remolacha.
Óscar Cuéllar aseguró que los 17 integrantes actuales de la asociación de productores y comercializadores, se encuentran muy ilusionados por la iniciativa de crear una Marca de Garantía y anunció que para conseguir y afianzar la producción es preciso contar con una semilla certificada que asegure su origen autóctono. Para ello propuso impulsar la investigación para purificar y sanear la simiente.
Al ajo se le atribuyen importantes propiedades y es uno de los cultivos de mayor antigüedad en la región. Castilla y León ocupa el tercer lugar entre las comunidades productoras de ajo, localizado en las provincias de Segovia y de Valladolid, y dentro de éstas el entorno de Vallelado ha destacado tradicionalmente por la fama y el prestigio en todo el territorio nacional de su variedad autóctona de gran calidad. La mayoría de los cultivadores de ajos lo hacen en regadío, una labor que se realiza entre mayo y junio. La siembra se realiza en el mes de noviembre y a comienzos de julio tiene lugar la recogida, para la que se precisa que estén totalmente secos, al menos, diez días antes.
Próxima feria promocional
Para impulsar la promoción de este producto, la asociación junto al Consorcio Agropecuario de Segovia, trabajan en la organización de una feria, coincidiendo con el habitual Festival del Ajo que cada año tiene lugar en el municipio a principios del mes de julio.
En esta ocasión se reforzará con un campeonato deportivo de pelota —otro de los atractivos que suele ofrecer este municipio— y con la posible presencia de cocineros de relevancia, como Carlos Arguiñano. En ella también se expondrán las cualidades de los ajos que se cultivan en la zona, aunque no se persigue su venta, ya que gracias a sus cualidades se vende toda la producción.
Localidades asociadas
Segovia. Chañe, Cuéllar, Fresneda de Cuéllar, Fuente el Olmo de Íscar, Mata de Cuéllar, Olombrada, Samboal, San Cristóbal de Cuéllar, Vallelado, Villaverde de Íscar.
Valladolid. Aldea de San Miguel, Bahabón, Campaspero, Camporredondo, Canalejas de Peñafiel, Cogeces de Íscar, Fompedraza, Íscar, La Parrilla, Langayo, Megeces, Mojados, Montemayor de Pililla, Pedrajas de San Esteban, Portillo, San Miguel del Arroyo, Torre, Torrescárcela, Viloria.
Consorcio Agropecuario