Mariann Fischer Boel, Comisaria de Agricultura y Desarrollo Rural, ha declarado lo siguiente: «Estos programas de desarrollo rural son cruciales para el futuro de nuestras zonas rurales. Este dinero ayuda al sector agrícola a diversificarse, además de financiar proyectos ambientales esenciales y crear puestos de trabajos fuera de la agricultura».
Programas acordados | En millones de euros | |
País o región | Presupuesto público total | Contribución FEADER |
Chipre | 325 | 163 |
Bélgica (Flandes) | 668 | 225 |
Alemania (tres Estados federados) Baden-Württemberg Renania-Palatinado Turingia | 1 266 487 894 | 611 245 693 |
Italia (tres regiones) Campania Friuli-Venecia Julia Liguria | 1.882 247 277 | 1 082 109 106 |
España (ámbito nacional) | / | / |
Puede encontrarse más información sobre los distintos programas en:
Chipre: MEMO/07/431 Flandes: MEMO/07/430: Alemania: MEMO/07/429, Italia: MEMO/07/428 España: MEMO/07/432.
Antecedentes:
Dentro de la reforma fundamental de la Política Agrícola Común (PAC) iniciada en 2003, también se ha revisado la política de desarrollo rural. La Comisión efectuó un análisis concienzudo de la política de desarrollo rural (DR), incluida una evaluación del impacto ampliada de la política futura en este ámbito, y formuló una propuesta en julio de 2004. En septiembre de 2005, el Consejo adoptó una política reformada de desarrollo rural para el período comprendido entre 2007 y 2013[2], que se caracteriza por los elementos de «continuidad y cambio».
Esta política sigue ofreciendo un conjunto de medidas entre las cuales los Estados miembros pueden escoger y para las cuales reciben apoyo financiero comunitario en virtud de los programas integrados de desarrollo rural. Al mismo tiempo, cambia la forma de desarrollar estos programas, reforzando el contenido estratégico y el desarrollo sostenible de las zonas rurales. Con este fin, la futura política de DR se centra en tres ámbitos fundamentales (ejes) decididos por común acuerdo:
- mejorar la competitividad de la agricultura y la silvicultura,
- apoyar la gestión de las tierras y mejorar el medio ambiente, y
- mejorar la calidad de vida y fomentar la diversificación de las actividades económicas.
Comisión Europea