Se oponen al plan de vacunación contra la brucelosis bovina

Nota de Asaja Cantabria
Esta postura siempre ha sido la misma, desde que tras la celebración de una Mesa Sectorial de Sanidad la Consejería trasladó a ASAJA-Cantabria, como miembro de la Mesa Agraria, un documento en el que pretendía vacunar de forma obligatoria las reses de las explotaciones de 33 Ayuntamientos.

Jóvenes Agricultores, desde un primer momento, ha solicitado a la administración la voluntariedad de la aplicación de la vacuna por parte de los ganaderos, además de ayudas compensatorias para los que la utilicen, como contrapartida por las pérdidas económicas que implica esta vacunación, y que se prolongan durante un periodo mínimo de siete años. Esta organización agraria defiende una postura razonable, coherente y con argumentos, no compartiendo con otras organizaciones la demagogia y el alarmismo con el que pretenden oponerse al Plan de Vacunación propuesto por la Consejería, y que más tarde deberán abandonar, aceptando las lógicas propuestas que ASAJA planteó desde el primer momento.

Como consecuencia de todo ello, ASAJA-Cantabria está dispuesta a liderar la oposición a la obligatoriedad de la vacunación planteada por la Consejería de Ganadería, consiguiendo el consenso de todas las organizaciones en torno a las posturas que ha defendido desde un primer momento, y está dispuesta a trabajar por los intereses de todos los ganaderos afectados por estas medidas.

Durante la celebración de esta Mesa Agraria, que estaba encabezada por la directora de Ganadería Carmen Fernández, se trató la entrada en vigor (a partir del 1 de enero próximo) del programa de eliminación de cadáveres que Ganadería tiene previsto implantar. Dicho programa consiste en un sistema de recogida de cadáveres bovinos, ovinos y caprinos de todas las edades de las explotaciones y su traslado a un centro de eliminación autorizado. Ante esta propuesta el presidente de ASAJA-Cantabria, y presidente de la Cámara Agraria, José Piñera, trasladó a la titular del Servicio de Sanidad, la imposibilidad por parte del sector de asumir los costes derivados de la destrucción de los cadáveres y solicitó que sea la propia administración la que asuma estos costes. A su vez solicitó que la crotalización de los animales se hiciese por parte de los ganaderos, como en la mayoría de las comunidades autónomas, y que dicho presupuesto se destinase a cubrir los gastos ocasionados por la puesta en práctica de esta nueva medida.

Asaja Cantabria

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