La ayuda se introdujo en la reforma de 2003 de la Política Agrícola Común como incentivo para que los agricultores aumentaran la producción de biocarburantes y de energía térmica y eléctrica a partir de biomasa.
Dentro de la superficie máxima garantizada de 2 millones de hectáreas, los agricultores reciben 45 euros por hectárea si han celebrado un contrato con un receptor o un primer transformador, tendente a garantizar que los cultivos van a utilizarse para su transformación en los productos energéticos pertinentes.
Si esto se supera, la superficie por la que cada agricultor puede solicitar la ayuda se reduce en un coeficiente tal que no se rebase el presupuesto de 90 millones de euros. En 2007 la superficie totalizó, aproximadamente, 2,84 millones de hectáreas y, por esa razón, se ha fijado un coeficiente de reducción de 0,70337. En otras palabras, los agricultores recibirán la ayuda de 45 euros por hectárea sólo para poco más del 70 % de los terrenos para los que la solicitaron.
«Esta ayuda ha servido para estimular al sector europeo de los biocarburantes», ha dicho Mariann Fischer Boel, Comisaria de Agricultura y Desarrollo Rural. «No obstante, cuando el próximo mes haya que realizar el chequeo de la Política Agrícola Común, tendremos que decidir si sigue siendo necesaria. Ahora tenemos un objetivo vinculante para los biocarburantes y un mercado floreciente».
Las cifras presentadas por los Estados miembros indican que, este año, se han presentado solicitudes para, aproximadamente, 2,84 millones de hectáreas. Por primera vez, los 10 nuevos Estados miembros que aplican el régimen de pago único por superficie han podido acogerse a esa ayuda. Por esa razón, ha aumentado la superficie máxima, pasando de 1,5 a 2,0 millones de hectáreas.
Todo indica que la simplificación del régimen, introducida recientemente por la Comisión, ha contribuido a aumentar su popularidad tanto entre los agricultores como en la industria de transformación. Hay nuevos elementos, por ejemplo la posibilidad de que los Estados miembros sustituyan una garantía por el «sistema de autorización opcional» de receptores y primeros transformadores, que han reducido considerablemente la carga administrativa.
El régimen empezó a aplicarse en 2004, y en ese año la superficie ascendió a 0,31 millones de hectáreas. En los dos años siguientes, esa superficie aumentó, pasando de 0,57 millones de hectáreas en 2005 a 1,23 millones de hectáreas en 2006. Este año, la superficie total ha alcanzado, aproximadamente, 2,84 millones de hectáreas.
La ampliación de la superficie con derecho a esa ayuda en 2007 demuestra el éxito del régimen entre los Estados miembros. En sólo cuatro años, el interés de los agricultores por la producción de cultivos energéticos ha aumentado considerablemente, y en 2007, por primera vez, se utilizará completamente el presupuesto de 90 millones de euros.
Comisión Europea