El consejero de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía, Isaías Pérez Saldaña, ha fijado para finales de semana la fecha de comienzo de las vacunaciones contra la fiebre catarral o lengua azul, una vez se conozca previsiblemente el miércoles el serotipo del virus.
Se retrasa así el inicio anunciado inicialmente para hoy de este tratamiento, que no afecta sin embargo a la puesta en marcha de las fumigaciones activas en las comarcas afectadas por el brote de la enfermedad.
Según el consejero sólo podría volver a postergarse el inicio de las vacunas si se determina que el serotipo es el dos y no el cuatro, para el que ya existen un millón y medio de dosis listas para aplicar a la cabaña ovina.
Pérez Saldaña, que se ha reunido con las organizaciones agrarias para exponerles el conjunto de medidas con las que frenar la expansión de la enfermedad, ha adelantado que será el viernes cuando quede aprobada la orden de inmovilización, en la que se establece una zona de protección de 100 kilómetros alrededor del foco de infección situado en Jimena de la Frontera (Cádiz) y una segunda zona de vigilancia que alcanza 150 kilómetros.
El titular andaluz de Agricultura no ha valorado en cifras los daños que pueden sufrir los ganaderos por la aparición de la fiebre catarral, pero sí ha reconocido que afectará muy negativamente a la economía del sector y que no se descarta abrir vías de ayudas para recibir fondos de la Unión Europea, al margen del apoyo financiero contra la enfermedad procedente del Ministerio de Agricultura por un importe de 5,2 millones de euros.
Precisamente de las instituciones comunitarias pueden proceder los principales inconvenientes para que los productores de carne puedan superar cuanto antes una posible crisis generada por la lengua azul.
Pérez Saldaña ha planteado la posibilidad de que la Unión Europea prolongue la prohibición de exportar rumiantes vivos desde Andalucía manteniéndola hasta durante un año, restricción que sólo dependiendo de la evolución en el control de la enfermedad podría irse flexibilizando.
Sobre el estado actual de expansión de la fiebre catarral, el consejero ha explicado que se han detectado 10 focos en un radio de 20 kilómetros, todos ubicados dentro del área Jerez de la Frontera-Jimena, mientras que los afectados son el ganado bovino, ovino y caprino.
Por su parte, desde Bruselas han venido las felicitaciones por la buena actuación y la pronta detección del virus. El comisario europeo de Sanidad y Protección de los Consumidores, David Byrne, aprovechó la reunión de ministros de Agricultura y Pesca de la Unión Europea en Luxemburgo para informar a los responsables de los Veinticinco de la actuación que se ha llevado a cabo en Andalucía gracias, sobre todo, a la cofinanciación europea para el programa de vigilancia que actualmente está en marcha en España.
En este sentido, señaló que había «buenas noticias» en torno a este brote ya que la presencia del virus se había detectado «muy pronto» en las granjas. «Ello hará posible contener mejor el brote y reducir las pérdidas antes de la llegada del invierno, periodo en el que los insectos transmisores son menos activos», apuntó.
COAG – A