En un encuentro, los representantes sindicales y la patronal negociaron y acordaron que el convenio tenga una vigencia de tres años, y plasme el compromiso de una subida lineal del salario de 25 euros mensuales cada año.
También se acordó la promoción profesional de los trabajadores y diversas mejoras en aspectos sociales, según avanzó el delegado sindical de UGT, Carlos Esperón Fernández.
Este preacuerdo, que será trasladado a los trabajadores del sector para que lo ratifiquen en asambleas el 4 de diciembre, afecta a 12.000 empleados del sector de alimentación de la provincia de Pontevedra, empleados en un millar de empresas.
Patronal y sindicatos retomaron las negociaciones tras dos jornadas de concentraciones, los días 23 y 24 de noviembre, y una jornada de huelga el 27 de este mismo mes, que tuvo un seguimiento de más del 90 por ciento, según los sindicatos.
Europa Press