Teresa Ribera ha subrayado que la lucha contra el cambio climático requiere una acción concreta, urgente y global para cambiar nuestro actual modelo de crecimiento económico que deberá impulsarse durante la próxima cumbre de Naciones Unidas sobre cambio climático en Copenhague en diciembre de 2009.
Para la Secretaria de Estado los grandes retos en la lucha contra el cambio climático son cambiar el modelo energético, ya que es el principal responsable de las emisiones de gases de efecto invernadero, y facilitar el acceso de la energía a más de 1600 millones de personas que hoy carecen de ella.
Desde la perspectiva global energética, la Secretaria de Estado ha destacado los datos recientemente publicados por la Agencia Internacional de la Energía, los cuales apuntan que el consumo de energía crecerá hasta el 45% en 2030 respecto a 2006 y que ello conllevará un incremento de la temperatura de 6º C, si no se implementan medidas que cambien radicalmente el actual modelo energético basado principalmente en combustible fósiles.
Los pilares del cambio de modelo energético pasan por el impulso a las energías renovables y las políticas de ahorro y eficiencia energética, según ha resaltado Teresa Ribera, en especial las energías renovables no solo favorecen la reducciones de emisiones de gases de efecto invernadero sino que también aportan soluciones tecnológicas para el acceso de energía en áreas más asiladas, permitiendo usar recursos autóctonos.
Asimismo, Teresa Ribera ha subrayado que las energías renovables en estos momentos están demostrando capacidad para impulsar la creación de empleo y reducir la dependencia de los combustibles fósiles y en consecuencia contribuir a la estabilización de los precios de las materias primas energéticas.
La Secretaria de Estado ha afirmado que las soluciones existen y la tecnología está disponible para avanzar en el cambio de modelo energético, por ello, ha resaltado que los esfuerzos se deben centrar en el diseño de marcos regulatorios adecuados para acelerar la transición; en el impulso de un rápido crecimiento de los mercados de carbono mundiales, que ofrezcan una clara señal de precio CO2, y por tanto, del coste real de las alternativas; y, por supuesto, en el impulso a una mayor inversión en I+D+i y demostración y generalización de opciones ya accesibles.
En este contexto, para Teresa Ribera, los países desarrollados deben ser responsables y tratar de facilitar la transferencia de tecnologías y conocimientos hacia los países más necesitados.
Teresa Ribera ha recordado que el pasado 26 de enero, setenta y cinco países firmaron los estatutos de creación de la nueva Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA, en sus siglas en inglés), la cual contribuirá a materializar la creación y transferencia de tecnología y capacidades que permitan gestionar la expansión de estas tecnologías en aquellos ámbitos donde hoy en día encuentran barreras, aumentando su demanda mundial.
La Secretaria de Estado ha finalizado su intervención subrayando que el cambio de modelo energético a escala global es necesario no sólo por razones de seguridad del suministro energético y sostenibilidad ambiental, sino también por razones económicas tanto a nivel nacional como global.
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