Rubia apuntó que, a esta circunstancia, se suma el hecho de que «la inmensa mayoría de los arroyos se encuentran sucios como consecuencia de la falta de limpieza», de modo que el agua se sale de su canalización y provoca «innumerables» desperfectos a su paso e inunda las parcelas agrícolas colindantes.
Así las cosas, debido a la «vital» importancia que tienen los caminos rurales para la actividad agraria y ante las demandas de numerosos olivareros a UPA-Jaén, principalmente porque tienen problemas para acceder a sus explotaciones, la organización solicitó a la Administración autonómica que «ponga en marcha, con urgencia, un plan andaluz de recuperación de los desperfectos de los caminos rurales», que valora en 60 millones de euros.
Con ello, se pretende que no se paralice la actividad agraria en los pueblos y permita que numerosos olivareros de toda la provincia jiennense puedan acceder a sus explotaciones para retomar la campaña de recolección de la aceituna, una vez que lo permitan las condiciones meteorológicas.
Por ese motivo, la Secretaria de Organización y Finanzas de UPA-Jaén confió en que la Junta de Andalucía, cuyo primer balance estima daños en el 80% de los 10.000 kilómetros de caminos rurales que existen en la provincia, actúe lo más rápido posible una vez que las precipitaciones se lo permitan para arreglar todos los desperfectos causados por el temporal con el objetivo de que los olivareros puedan continuar o, en algunos casos, iniciar la actividad agraria en sus fincas y no se pierda aún más producción.
Europa Press