Esta cifra supone una bajada en la producción regional importante, pasando de las 112.226 toneladas obtenidas en la pasada campaña 2007/2008, cifra récord histórica en Castilla-La Mancha, a las 63.000 de la actual campaña, lo que se traduce en una disminución de casi el 44%.
A juicio de UCAMAN esta disminución era de esperar, ya que el olivar castellano-manchego es un cultivo vecero y variable anualmente por excelencia, por ello, a pesar de la gran cosecha del año pasado en provincias como Ciudad Real, este año la provincia producirá un 31% menos que la pasada campaña; no obstante en Toledo, y tal vez por la alta predominancia de la variedad Cornicabra –mucho más variable que otras variedades presentes en otras provincias- la bajada de producción será muy significativa, alcanzando poco más de 17.500 toneladas, frente a las 43.900 de la campaña anterior (una disminución del 60%).
En provincias como Albacete se estima una disminución de cosecha cercana al 25% debido a que la reducción de cosecha no es tan acusada, y existen zonas olivareras que siguen recuperando producciones en olivares afectados por heladas de años anteriores. En las provincias de Cuenca y Guadalajara los olivos se han visto afectados durante 2007 por heladas que finalmente mermarán su producción, por lo que se estima una reducción entre un 30 y 40% del aceite extraído en la campaña pasada.
Datos nacionales
Estos datos de cosecha autonómica no son significativos para los mercados si no se complementan con una estimación de la cosecha nacional. Según las cooperativas se estima una producción nacional de 1.173.000 toneladas, producción inferior en más de 150.000 toneladas a la de la campaña anterior, por lo que el stock fin de campaña de 325.000 toneladas no resulta alarmante para el desarrollo de la nueva campaña de comercialización, ya que 200.000 toneladas de dicho enlace son imprescindible para surtir el consumo en los meses que dura la recogida de la aceituna, y hay 150.000 ton menos de producción que la campaña pasada.
A nivel mundial, el Consejo Oleícola Internacional ha publicado recientemente los datos, que reflejan que el consumo mundial de aceite de oliva aumentará en 97.000 toneladas de la campaña 2007/2008 a la 2008/2009, e incluso que en esta campaña que ahora empieza el consumo superará a la producción a nivel mundial. Esta es una excelente noticia para el sector almazarero cooperativo, que aun así se prepara para los nuevos retos del mercado realizando sus aportaciones económicas obligatorias desde este mes, para destinar fondos a la promoción del aceite de oliva español.
De hecho los primeros 12 días de diciembre todas las almazaras regionales han recibido – informáticamente, cuando realizan sus declaraciones de producción y movimientos de aceite a la Agencia Española del Aceite – una notificación del pago que han debido hacer antes del 10 de diciembre a la Interprofesional del Aceite de Oliva Española para la promoción, investigación e información. Este pago no es exclusivo de almazaras, sino que todos los operadores que participan en la cadena – envasadores, intermediarios – deben afrontar su cuota correspondiente, que ayudará a abrir nuevos mercados al aceite de oliva español y castellano manchego.
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