UE: ‘Con las reformas creamos regímenes más competitivos en los cultivos mediterráneos’

Nota de la UE

El Consejo de Ministros ha decidido reformar profundamente las ayudas que se conceden al tabaco, el aceite de oliva y las aceitunas de mesa, el algodón y el lúpulo al amparo de la política agrícola común (PAC). Gracias a estas reformas aumentará la competitividad, se conseguirá una mayor orientación de mercado, mejorarán los aspectos medioambientales, se producirán menos distorsiones comerciales y se estabilizarán las rentas agrícolas. En estos cuatro sectores, una parte considerable de los actuales pagos vinculados a la producción se convertirá en un pago único disociado de ésta. Antes de que las ayudas al tabaco se disocien totalmente de la producción, los Estados miembros podrán decidir mantener algunos elementos vinculados a ésta durante un periodo de transición de cuatro años. Una parte de las primas por tabaco actuales se dedicará a financiar programas de reestructuración en las regiones afectadas a partir de 2010. Respecto al aceite de oliva, el Consejo ha decidido que los Estados miembros pueden mantener un pago específico vinculado a la producción, que puede llegar hasta un 40%. Asimismo, los ministros han acordado que se disocie de la producción el 65% de las ayudas al algodón y que se mantenga el 35% en forma de pagos por hectárea. Las ayudas al lúpulo se disociarán totalmente de la producción, pudiendo decidir los Estados miembros que se mantenga hasta un 25% de las antiguas ayudas. Todas las reformas comenzarán en 2006.

«La decisión adoptada ayer supone una señal clara para nuestros agricultores, consumidores y contribuyentes: la nueva política está encaminada a lograr un sector agrario competitivo, respetuoso con el medio ambiente y orientado hacia la calidad, y estas reformas suponen un mensaje claro a nuestros socios comerciales, especialmente a los países en desarrollo. Mientras que otros han invertido sus políticas, en el caso de Europa no hay vuelta atrás. Seguimos adelante con nuestras reformas para que nuestra política agrícola distorsione cada vez menos el comercio», dijo Franz Fischler, comisario de Agricultura, Desarrollo Rural y Pesca.

La reforma del sector del tabaco

El Consejo ha decidido que la disociación de la producción se realice gradualmente a lo largo de un periodo de transición de cuatro años que comenzará en 2006. En esos cuatro años, al menos el 40% de las primas por tabaco tienen que pasar a formar parte de un pago único por explotación disociado de la producción. Los Estados miembros pueden decidir conservar hasta un 60% de aquellas en forma de pagos vinculados a la producción.

Estos pagos pueden reservarse para los productores de las regiones del objetivo nº 1 o para los que produzcan variedades de una determinada calidad.

A partir de 2010, una vez transcurrido el periodo de transición, las ayudas al tabaco se disociarán completamente de la producción. El 50% se transferirá al pago único por explotación y el 50% restante se destinará a programas de reestructuración amparados en la política de desarrollo rural.

En 2005, se aplicará el actual régimen del tabaco, incluidas las ayudas fijadas para 2004. En 2006, se pondrá en marcha la reforma mediante la transformación total o parcial de la actual prima por tabaco en derechos al pago único.

La reforma del sector del aceite de oliva

En el periodo de referencia 2000-2002, al menos el 60 % de los pagos medios actuales vinculados a la producción (2 300 millones de euros anuales en la UE-15) se convertirán en derechos del régimen de pago único, en el caso de las explotaciones de más de 0,3 ha. Para el cálculo del importe correspondiente a cada olivarero, el periodo de referencia incluirá el periodo 2000-2003.

Los pagos de las explotaciones olivareras con una superficie inferior a 0,3 ha se disociarán totalmente de la producción a partir de 2006.

Los Estados miembros podrán conservar las restantes ayudas pagadas (40 %) en forma de dotaciones nacionales destinadas a conceder a los productores un pago suplementario por olivar. Para simplificar, no se asignarán pagos por olivar inferiores a 50 euros por solicitud de ayuda.

Los Estados miembros podrán destinar a medidas de calidad hasta el 10% de sus dotaciones para aceite de oliva.

Para evitar desequilibrios de mercado, el acceso al régimen de pago único deberá limitarse a las zonas olivareras que ya existieran antes del 1 de mayo de 1998 y a las nuevas plantaciones previstas en los programas aprobados por la Comisión. Con el fin de tener en cuenta las ayudas concedidas a las nuevas plantaciones de Francia y Portugal después de esa fecha, se añadirán 1 millón de euros para aquella y 19 millones de euros para éste.

El régimen actual se seguirá aplicando en la campaña de comercialización de 2004/05.

Algodón

El 65 % de la dotación presupuestaria se dedicará a ayudas a la renta disociadas de la producción.

El 35 % restante se convertirá en una ayuda por hectárea de algodón destinada a los productores. El nuevo pago por superficie se concederá por un máximo de 455 360 ha (370 000 ha en Grecia, 85 000 ha en España y 360 ha en Portugal). En caso de que la superficie subvencionable dedicada a algodón supere a la superficie máxima, la ayuda por hectárea se reducirá proporcionalmente.

En el caso de Grecia, el Consejo ha decidido dividir en dos la superficie básica de 370 000 ha. La ayuda por superficie que se conceda por las primeras 300 000 ha será de 594,1 euros/ha, siendo de 342,85 euros/ha la correspondiente a las 70 000 ha restantes.

Al igual que las demás ayudas directas a los productores, la ayuda por hectárea de algodón tendrá que cumplir ciertas obligaciones horizontales, como la condicionalidad, la modulación y la disciplina financiera.

Es posible que la reforma requiera una cierta adaptación del sector del algodón. Para respaldar este proceso, el Consejo ha decidido asignar una dotación financiera para programas de reestructuración en las regiones productoras de algodón al amparo de la política de desarrollo rural.

La Comisión pondrá en marcha un mecanismo que le permita efectuar un seguimiento de las repercusiones de las ayudas al algodón así como de la reforma de la producción y el comercio de este producto.

Lúpulo

El Consejo ha decidido integrar las ayudas al lúpulo en el régimen de pago único disociado de la producción. No obstante, la decisión del Consejo prevé la posibilidad de que los Estados miembros concedan un máximo del 25 % a los agricultores o a las organizaciones de productores, habida cuenta de las condiciones de producción específicas o de las circunstancias concretas de las regiones productoras.

Para la cosecha de 2005 se aplicarán el régimen vigente y las ayudas fijadas para 2004.

UE

Deja una respuesta