Este síndrome aumenta el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y afecta al 20% de la población adulta mundial, informa la URV.
La investigación, seleccionada por la Sociedad Americana de Química, la han llevado a cabo Cristina Andrés, Sara Tulipani, Rafael Llorach y Mar Garcia, del Departamento de Nutrición y Bromatologia de la Universidad de Barcelona (UB); Olga Jáuregui, de los Centros Científicos y Tecnológicos de la UB, y los expertos Jordi Salas Salvadó, Patricia López-Uriarte y Mónica Hiervo, de la Universitat Rovira i Virgili (URV) y del Centro de Investigación Biomédica en Red del Instituto Carles III.
El estudio es pionero porque aplica técnicas de metabolómica para analizar los efectos de la dieta en pacientes con el síndrome, una enfermedad que, según la OMS, afecta al 20% de la población adulta, está relacionada con la inflamación y el estrés y aumenta el riesgo de sufrir diabetes de tipo 2 y enfermedades cardiovasculares.
Los científicos analizaron el espectro de compuestos excretados en la orina, y encontraron evidencia de varios cambios significativos después de haber consumido frutos secos, sobre todo, un nivel más alto de metabolitos -las moléculas producidas o usadas durante el metabolismo- derivadas de la serotonina, los ácidos grasos y los polifenoles.
Estos resultados refuerzan la hipótesis de que, a través de estas moléculas, se podrían explicar algunos de los beneficios sobre la salud que se han observado en otros estudios, ya que «si analizamos los resultados entre los dos grupos de pacientes encontramos diferencias significativas en estos marcadores biológicos«, dice la investigadora principal, Sara Tulipani.
Sin embargo, añade, «aún no podemos saber qué porcentaje de los metabolitos detectados en la orina tienen un papel directo, estimulado o indirecto en la promoción de la salud relacionada con el consumo de frutos secos».
Muchos estudios científicos se centran en el impacto de la dieta en la prevención de alteraciones metabólicas y esta investigación aporta unos primeros resultados de los efectos beneficiosos del consumo de fruta seca que reducen las sustancias asociadas con procesos inflamatorios y otros factores de riesgo cardiovascular en pacientes con el síndrome metabólica.
Agriberia