UN SISTEMA DIGITAL DE INFORMACIÓN GEOGRÁFICA CONTROLARÁ EN ESPAÑA LA PRODUCCIÓN DE ACEITE – AGRICULTURA Y PESCA

El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) pondrá en marcha un Sistema de Información Geográfica Oleícola (SIG), una base gráfica informatizada que abarcará las parcelas de olivar de las treinta y cinco provincias productoras de aceite. La base está compuesta por ortografías digitales, los límites de las entidades administrativas y de las parcelas según el registro catastral y la localización individual de los olivos. Hasta el momento, se ha realizado la fotointerpretación de 1.400.000 parcelas, de las cuales ya han sido objeto de control en campo más de 200.000. Las estimaciones previas establecen que se comprobará sobre el terreno una cantidad próxima a las 500.000 parcelas. Para ello, el equipo de 200 ingenieros que efectúa los controles, recorrerá en sus vehículos más de 5 millones de kilómetros, según los cálculos del equipo técnico responsable. Manuel Lamela, subsecretario del MAPA, señala que «el objetivo del sistema es saber en todo momento la realidad del olivar español, y esto tiene dos efectos fundamentales, el primero una mejora de la gestión de las ayudas comunitarias que percibe el olivar, que actualmente superan los 170.000 millones de pesetas. El segundo efecto es que se facilita enormemente a los agricultores la tramitación de los expedientes de ayudas, tanto que antes de 2004 podrán incluso realizar sus consultas y trámites a través de Internet con lo que las discrepancias podrán ser resueltas en tiempo real, lo que redundará en beneficio de agricultores y Administraciones». Lamela explica que «con el SIG oleícola estamos adquiriendo una experiencia básica para la puesta en marcha de un gran sistema integrado de gestión y control de los cultivos herbáceos». Según Manuel Lamela, el proyecto del MAPA, actualmente en ejecución, tiene un presupuesto de 5.500 millones de pesetas, «y los trabajos de digitalización se encuentran en un estado de avance muy notable, porque están finalizados en unos 3.300 términos municipales, sobre un total de 3.495 previstos en la actualidad, lo que representa el 97,7 por ciento del total, de forma que ya hemos digitalizado, por ejemplo, todo el territorio de la comunidad autónoma de Andalucía, principal región productora de aceite de España». El Sistema de Información Geográfica Oleícola esta regulado y descrito por la legislación comunitaria, que establece que en él se creará una base gráfica informatizada que abarcará las parcelas de olivar de interés (artículo 24 del Reglamento CE 2366/98.) El ámbito de trabajo es la totalidad de la superficie geográfica de las 34 provincias olivareras españolas, que asciende a unos 385.552 kilómetros cuadrados. Las ortografías digitales están realizadas a partir de un vuelo fotogramétrico efectuado por la Comisión Europea para el proyecto OLISTAT (determinación del número de olivos en los estados miembros mediante encuesta estadística) de 1997/98. Los medios empleados corresponden a la tecnología más moderna existente, con aviones bimotores turbohélice presurizados y equipados con cámaras de alta resolución que, volando a altitudes cercanas a 7.000 metros, efectuaron un total aproximado de 18.000 fotografías de alta resolución a escala 1:40.000, que han sido digitalizadas. Las ortofotografías digitales comprenden la totalidad de la superficie de las 34 provincias olivareras (38.555.200 hectáreas) y se encuentran prácticamente finalizadas en la actualidad, quedando pendiente sólo unas pequeñas áreas de máxima dificultad en la cordillera pirenaica que están en curso de finalización. El tratamiento de ortorrectificación digital de las imágenes obtenidas en el vuelo elimina las deformaciones propias de las fotografías y tiene como resultado la obtención de ficheros de imágenes digitales del terreno. Las imágenes digitales georreferenciadas permiten disponer de un producto con innumerables aplicaciones para la gestión del territorio, en el que se integran conjuntamente la apreciación visual de la totalidad de terreno desde el aire, junto con una precisión cartográfica muy superior a la de la cartografía convencional a escala 1:10.000. El conjunto de información para la delimitación de las parcelas en el SIG Oleícola en España procede de la cartografía catastral oficial, puesta a disposición del proyecto por la Dirección General del Catastro del Ministerio de Hacienda. La cartografía catastral, una vez digitalizada, se superpone sobre la cobertura de ortofotografías, permitiendo disponer de información integrada que, junto con las ventajas propias de la ortofotografía, presenta también los límites de las entidades administrativas y de las parcelas catastrales. La utilidad de la información en este nivel es muy importante, no solamente para los aspectos propios relacionados con el olivar, sino que su empleo es de aplicación en otros sectores en los que también son de interés las delimitaciones de la parcelación. «Será un instrumento realmente útil para todas las comunidades autónomas que les permitirá la correcta gestión y tramitación de las ayudas comunitarias», señaló Lamela. La única limitación actual de este producto es que su ámbito de creación se reduce a los polígonos catastrales con olivar, que son las áreas de interés específicas para el SIG Oleícola, pero existen otros proyectos y actuaciones futuras en los que está previsto la extensión de estas coberturas de información a la totalidad del territorio nacional, dentro de lo que se conoce como Sistema Integrado. La localización individual de los olivos exige que, para cada uno de ellos, sean determinadas las coordenadas geográficas de su posición, de forma que cada olivo pueda ser identificable sobre el terreno a partir de ellas. En cada una de las parcelas de interés para el SIG Oleícola se realizan trabajos de fotointerpretación sobre las coberturas de información creadas con anterioridad, de forma que se identifican individualmente los posibles olivos sobre las imágenes. Para llevar a cabo estos trabajos, el MAPA cuenta con herramientas informáticas de teledetección específicamente desarrolladas para el proyecto. Los tamaños, formas y niveles de oscuridad de las copas de los árboles son los factores que permiten realizar un primer conteo de los olivos en la parcela. Como segunda fase de este proceso para la determinación del número de olivos de una parcela, un fotointérprete experimentado procede a la revisión de las imágenes y de los resultados del conteo efectuado informáticamente, completando el trabajo y verificando los resultados antes de su aceptación. Como información complementaria, para realizar esta actividad, se dispone de los resultados de los trabajos del Registro Oleícola Español, en el que durante el periodo 1990-1996 fueron comprobadas en campo cerca de 1.500.000 parcelas. Esta información es de gran utilidad en los casos en los que el cultivo del olivar no haya evolucionado con posterioridad a las visitas a campo efectuadas en los citados trabajos. En aquellos casos en los que los resultados de la apreciación de los olivos sobre las imágenes son poco concluyentes, bien por el reducido tamaño de las copas de los olivos jóvenes, o porque se presume la existencia de otras especies arbóreas diferentes al olivar coexistiendo en el mismo espacio físico, se efectúan controles sobre el terreno, a fin de determinar las cifras y posiciones de los olivos con la máxima precisión. Dentro de este grupo de parcelas se encuentran las nuevas plantaciones, realizadas en muchos casos durante el año 1997 y primavera de 1998. El Reglamento CE nº 1593/2000 del Consejo, de 17 de julio de 2000, establece que cada Estado Miembro creará un sistema integrado de gestión y control, un sistema integrado que se aplicará a los sectores de producción vegetal y animal.

MINISTERIO DE AGRICULTURA

Deja una respuesta