Gracias a su bajo peso, aproximadamente un 90% más ligero que los módulos fotovoltaicos cristalinos rígidos, pueden colocarse en cualquier tipo de cubiertas sin tener que añadir una estructura de soporte. Al tratarse de módulos flexibles se adaptan a cualquier superficie aprovechando al máximo el espacio disponible y con ello maximizando la producción de energía.
Es cierto que frente a los tradicionales paneles fotovoltaicos de carácter fijo estos módulos flexibles presentan un rendimiento eléctrico ligeramente menor por m2. Sin embargo, Enrique Myro, promotor de esta EBT almeriense, asegura que “estos sistemas poseen muchas ventajas, entre las que destaca su mayor resistencia a la temperatura y a la suciedad y su bajo coste de producción y comercialización. Además, los paneles fotovoltaicos Solmeraya aumentan su eficacia en climas con un elevado número de horas de sol e insolación, como es el caso de Andalucía”.
Uso en balsas de riego y superficies de invernaderos
Este novedoso producto se adapta a las necesidades específicas del sector agrícola, como por ejemplo, el recubrimiento fotovoltaico en la superficie de los invernaderos y de las balsas de riego. En palabras de Enrique Myro, “con su utilización como cobertura de dichas balsas se obtiene un doble beneficio: por una parte, este material evita la evaporación del agua y la proliferación de algas en el interior de la basa de riego. Y por la otra, se produce energía eléctrica aprovechando la existencia de una superficie que cumple una función pero que en ella misma no se realiza ninguna actividad”. De este modo el aprovechamiento de la superficie es máximo generando una elevada rentabilidad.
Lo mismo ocurre con la superficie de los invernaderos. Tan sólo cubriendo el 10% de la superficie de los mismos no se ve afectada la producción agrícola y, por otra parte, suponen una fuente de ingresos adicional y constante para los agricultores debido a la generación de energía fotovoltaica. De esta forma se producirá un aprovechamiento electro fotovoltaico en lugares donde no se aprovechaba nada. El papel de los investigadores de la Universidad de Almería es el e aportar tecnología avanzada en cuanto al diseño de los soportes de las láminas fotovoltaicas.
Solmeraya nace en marzo de 2008 con el apoyo de empresarios con amplia experiencia en el sector de las energías renovables y de investigadores de la Universidad de Almería, pertenecientes al Departamento de Ingeniería Rural, cuyo domicilio social se encuentra en esta localidad andaluza. Enrique Myro y José Antonio Navarro –ingenieros industriales–, junto con la Cooperativa Agrícola Alimer (Murcia) son sus principales promotores.
Innova Press
Creo que deben concretar las ofertas y especificar medidas, rendimientos aproximados y precios orientativos