Rosa Estaràs presentó hace unos meses una pregunta a la Comisión Europea para pedir información sobre los programas europeos destinados a combatir plagas como la del picudo rojo (Rhynchophorus Ferrugineus). En su respuesta, el comisario europeo de Salud y Consumo, John Dalli, respondió que ya en 2007 la Comisión adoptó medidas de emergencia para controlar la entrada y proliferación del picudo rojo y que en 2010 se modificó esta decisión, para introducir medidas más estrictas. Según esta normativa, los Estados miembros han de llevar a cabo inspecciones anuales para comprobar la presencia del insecto y, en el caso de que se confirme, deben establecer un área demarcada y elaborar un plan de acción con las medidas oficiales para erradicarlo.
En cuanto a la ayuda financiera, Dalli indicó que en virtud del régimen fitosanitario de la Unión Europea, los Estados miembros pueden recibir, si así lo solicitan, una participación financiera destinada a la lucha fitosanitaria. Con ella se cubren los gastos directamente relacionados con las medidas necesarias adoptadas con el fin de erradicar el organismo nocivo o evitar su avance. En este sentido, manifestó que en los últimos años, la Comisión no ha recibido ninguna solicitud de ayuda de las autoridades fitosanitarias españolas en relación con este escarabajo procedente de Asia.
Rosa Estarás recuerda que desde hace dos años una plaga de picudo rojo ha atacado a cientos de palmeras de la isla de Mallorca y que durante el ejercicio 2009 se detectaron y quemaron 164 palmeras dañadas por estos organismos. Asimismo, señaló que en 2010 el número de árboles perforados por ese insecto se multiplicó por más de cuatro, con lo que se registraron 744 palmeras afectadas.
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