La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA-Andalucía) sigue detectando abusos comerciales en los precios finales aplicados al consumidor de frutas y hortalizas frescas, a pesar de las bajas cotizaciones en origen. De entre los productos analizados, se desprende que la sandía sin pepitas se paga al agricultor a 0,08 Euros por kilo pero cuando llega al consumidor su precio se infla hasta 0,80 Euros, lo que representa un incremento del 1.000%. Esta formación de cotizaciones “insólita” e “injusta” para productores y consumidores también la detectamos en zanahoria, con márgenes del 818%; repollo, con un 667% y calabacín, con el 500%. Abusivo, igualmente, es el incremento al consumidor en otros productos frescos como la pera blanquilla o el melón piel de sapo.
UPA-A lamenta que, lejos de solucionarse, la brecha entre los precios que reciben los agricultores de prácticamente todas las comarcas productoras de Andalucía y los que pagan los consumidores no deja de aumentar. ¿El motivo? Los márgenes abusivos que se generan en el proceso de distribución comercial —y en esto mayoristas y minoristas comparten responsabilidad—. A juicio de nuestra Organización, el Servicio de la Competencia debe actuar de urgencia para corregir los abusos de las empresas distribuidoras que provocan la ruina económica del productor y representan un fraude para el consumidor. No es de recibo que intermediarios, las grandes distribuidoras y los especuladores utilicen a los agricultores para su propio enriquecimiento. UPA-A aboga igualmente por la creación de un frente común con asociaciones de consumidores y otros agentes económicos y sociales del sector para poner coto a estas prácticas injustas que se han convertido en un problema estructural con incalculables costes sociales y económicos para el medio rural andaluz.
UPA-A seguirá pidiendo a las Administraciones igualmente, como hasta ahora ha hecho, otras medidas como el doble etiquetado en las frutas y hortalizas que permita conocer al ama de casa cuanto se pagó al agricultor; una Ley de márgenes comerciales; sanciones para los especuladores; medidas que permitan controlar la oferta de fruta y hortaliza y campañas de promoción del consumo, entre otras.
UPA