UPA-Andalucía pide tranquilidad a los consumidores sobre la carne de pollo

Nota de UPA-A
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos, UPA-Andalucía, llama a la tranquilidad a los consumidores andaluces tras la alarma internacional creada por la llamada “crisis del Pollo”, porque las explotaciones producen aves con todas las garantías de calidad y seguridad alimentaria. Andalucía concentra 750 de las más de 5.000 explotaciones que existen en España. Se trata de un sector dinámico, que genera además 5.600 puestos de trabajo. En el ejercicio de 2003, las granjas de la Comunidad produjeron 230.000 toneladas de esta ave. Desde UPA Andalucía se anima a las autoridades sanitarias a intensificar los mecanismos de control en frontera aunque el riesgo de contagio es mínimo. No en vano, la difusión de la gripe se está produciendo en Asia, donde se han sacrificado ya más de 25 millones de aves en la campaña contra la epidemia. En esta área geográfica, y entre los países afectados, sólo se ha importado en el pasado desde Tailandia y exclusivamente carne (la denominada “gripe del pollo” sólo se transmite en animales vivos). En este sentido, UPA-A valora muy positivamente la decisión de la Unión Europea de prohibir la importación de aves o incluso su carne desde Tailandia durante cinco meses, lo que debe aportar mayor tranquilidad si cabe al consumidor.

No obstante, desde UPA-A se tiene que lamentar la actitud “irresponsable” del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, MAPA, y de su titular, Miguel Arias Cañete, que en plena crisis internacional, decide ignorar a los productores avícolas, y reunirse sólo con la patronal representada en Propollo –industriales-, en un ejercicio de “sectarismo” y “amiguismo”, del que Cañete ha hecho gala durante toda la legislatura.

Esta crisis vivida en el sudeste asiático, como en su día ocurrió con “el mal de las vacas locas” debe servir a todos para continuar apostando por la calidad y la seguridad alimentaria, especialmente a través de códigos de buenas prácticas –de la granja a la mesa- y de sistemas de cría y cultivo sanos, que redunden en una mayor inocuidad de los alimentos, tal y como se ha demandado también por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). En este sentido, Europa debe dar ejemplo y ayudar a otros países a mejorar sus sistemas de producción. Conviene recordar que la difusión de la gripe del pollo podría haber sido facilitada por un aumento exponencial de la producción avícola y por la masiva concentración de animales en algunas zonas geográficas, según ha reconocida la propia FAO.

UPA-A, en defensa de la calidad y la seguridad alimentaria

En este contexto, UPA-A ha liderado desde hace años una intensa campaña para favorecer la calidad y la seguridad de los alimentos, especialmente en lo que ser refiere a la producción de aves. En este sentido, y a instancias de nuestra organización agraria, los integrantes de la Organización Interprofesional de la Avicultura de Carne llegaron este mes a un acuerdo que establece que los contratos de Integración que rigen las transacciones entre las empresas integradoras y los ganaderos irán acompañados a partir de ahora por un anexo que lo desarrolla.

UPA-Andalucía ha valorado este logro, porque supone un avance muy importante en las relaciones empresariales entre productores e integradoras, lo que redundará también en un aumento en la renta de los avicultores andaluces. De igual modo, permitirá finalmente ofrecer al consumidor un producto con todas las garantías sanitarias y de calidad, aunque se trata tan sólo de un documento de partida.

En este sentido, UPA-A anima a todos los sectores productivos agrarios y ganaderos a trabajar, con el apoyo de las Administraciones, en potenciar todas aquella actuaciones que favorezcan idóneas prácticas productivas -que las granjas familiares están en condiciones de cumplir mientras que no siempre se puede decir lo mismo de las explotaciones superintensivas-, al tiempo que aboga por dar máximas muestras de transparencia, extremando los medios de producción, lo que aportará garantía al consumidor sobre la inocuidad de los alimentos que llegan a los mercados

UPA-A

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