Nota de UPA
Una importante delegación de agricultores de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), se ha manifestado en Bruselas junto a varios miles de cultivadores europeos en defensa del sector remolachero español. La manifestación, en la que participan también productores de Portugal, Irlanda e Italia, entre otros, ha recorrido las calles de la capital belga para acabar en una concentración frente a la sede de la Comisión Europea. El sector acudía unido para mostrar su más rotundo rechazo a la propuesta del comisario Fischler sobre la reforma de la OCM del azúcar que presentaba hoy oficialmente al Colegio de Comisarios.
Finalmente Fischler se ha salido con la suya y el Colegio de Comisarios ha aprobado la propuesta que ahora pasará a dictamen del Parlamento Europeo, Consejo Económico y Social Europeo y Consejo de Ministros de Agricultura de la UE. El Secretario General de UPA, Lorenzo Ramos, quien se ha manifestado en la capital belga junto al resto del sector productor español, ha considerado de “inadmisible” y un “auténtico disparate” que se abra paso una reforma que pone en riesgo la supervivencia de 20.000 familias que viven de este cultivo en España.
La bajada de precio de la remolacha propuesta por Fischler y la reducción de cupos sería “catastrófica” para las zonas productoras, ya que según ha recordado Lorenzo Ramos, “este cultivo no tiene ayudas de la Unión Europea, por lo que no tiene sentido que se defienda una reforma que plantea la reducción en un 43% de los precios que perciben los profesionales por la remolacha, lo que hace imposible afrontar los costes de producción”, ha argumentado el líder sindical agrario.
Fischler, quien pasará a la historia por lapidar los cultivos mediterráneos, ha conseguido sacar adelante su propuesta de reforma que plantea, además de la bajada precios de la remolacha, menos cupos y posibles transferencias de los mismos entre Estados Miembros, lo que podría provocar un trasvase de producción desde España hacia países como Alemania, Francia o Bélgica, ha asegurado Lorenzo Ramos, quien añade, no obstante, que todavía es posible parar “este disparate”. Para ello ha pedido la unión sin fisuras de todo el sector y que el Gobierno español adopte una posición activa para paralizar la reforma.
UPA