El secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), Fernando Moraleda, que mantuvo una reunión con el Ministro de Agricultura, Arias Cañete, para analizar la próxima reunión del Consejo de Ministros de la UE que se inicia mañana en Bruselas y que previsiblemente aprobará la
reforma de la PAC presentada por el Comisario de Agricultura, Franz Fischler, denunció el aislamiento político del Gobierno español y el riesgo de que se haga realidad la amenaza más grave para la agricultura y la ganadería española desde la puesta en marcha de la Política Agraria Común de la que se cumplen ahora 40 años.
Fernando Moraleda mostró su preocupación porque Arias siga sin concretar los países que pueden conformar esa minoría de bloqueo que se opone a las tesis de Fischler y destacó que el ministro "no puede corresponsabilizar a las organizaciones agrarias de su gestión errónea", por lo que le pidió que "se tranquilice y se prepare para esta recta final y traiga un acuerdo positivo para España, ya que esa es su responsabilidad".
El secretario general de UPA, rechazó las acusaciones del Ministro de Agricultura en el sentido de que su organización sólo se limita a criticar su gestión y apuntó que UPA ha planteado alternativas a la PAC desde hace meses y hace dos planteó un estudio de impacto de la aplicación de la desvinculación parcial con ayuda multifuncional fija para zonas desfavorecidas que el MAPA no ha desarrollado. UPA, por el contrario, considera muy grave que cuando quedan apenas tres días para aprobar la reforma, desconoce el texto alternativo o la propuesta del Ministerio de Agricultura.
UPA considera que el comisario Franz Fischler, dispone ya de la mayoría suficiente para llevar a cabo la reforma de la Política Agraria Comunitaria (PAC) después de haber mantenido reuniones bilaterales con algunos países. Para Moraleda, el hecho de que Alemania y Francia puedan haber alcanzado ya un acuerdo para dicha reforma "es perjudicial, porque sus intereses no son los mismos que los nuestros".
UPA manifiesta su preocupación por la ausencia en España de un debate público sobre la reforma de la PAC, y añadió que tras la crisis abierta por la guerra de Irak con Francia y Alemania, el Gobierno "no puede ahora pedirle a estos países dinero para la agricultura española".
En definitiva, Moraleda, calificó de "ineficaz" el papel desempeñado por el Gobierno español en las negociaciones sobre la reforma de la PAC y aventuró un futuro complicado para la mayoría de las explotaciones agrarias familiares españolas. Por ello, en el caso de que el Ministro de Agricultura no consiga reorientar radicalmente la reforma, que él mismo calificó en enero de "arriesgada, excesiva e intransigente", UPA exigirá al Gobierno español que compense con dinero de los Presupuestos del Estado las consecuencias negativas que para la agricultura española pueda acarrear la reforma agraria.
El secretario general de UPA, señaló por último que "me gustaría que no se ocultase la situación mediante una campaña mediática y que el ministro informe públicamente de la realidad y de las consecuencias que la aprobación de esta reforma va a tener para la agricultura española, siguiendo sus propios estudios de impacto de hace pocos meses".
UPA