La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), muestra su sorpresa e indignación por la forma en que el Ministerio de Agricultura está vendiendo allá donde puede los magníficos resultados de comercialización de la campaña de aceite de oliva que acaba de terminar. Destaca con gran alborozo el incremento de las exportaciones, del consumo interior y la reducción de las importaciones. UPA considera que todo esto es verdad y nos alegramos de que así sea.
Sin embargo, el análisis que se hace de la campaña es cuando menos parcial e interesado ya que se oculta sin ningún pudor la evolución que ha tenido el precio y las ayudas y, por tanto, la renta de los olivareros.
Según el estudio de UPA, el precio medio de la campaña, pese al repunte final de los precios, es el más bajo de los últimas cinco años, alcanzando tan sólo las 280 ptas por kilo frente a las 338 pesetas por kilo recibidas en 1997.
La insistencia del Ministro de Agricultura, Arias Cañete en dar como buena noticia que este año se han superado el millón de toneladas de ventas, tanto al mercado nacional como internacional, ligada a la circunstancia anteriormente comentada nos lleva a afirmar que para UPA no es tan importante el volumen comercializado como el precio final, o dicho de otra forma: hoy por hoy todo se vende en el mercado, dependiendo del precio de venta. Si en lugar de 972.000 Toneladas. de aceite producido, hubiera habido 1.300.000 toneladas. se habría vendido todo el aceite, sólo que a con un precio mucho más bajo.
Dicho esto, y dejando claro que la preocupación de UPA es garantizar una renta digna a los olivareros, consideramos que es necesario lo siguiente:
1. regular la oferta, mediante la prohibición de nuevas plantaciones. Hay que plantear seriamente si se puede seguir con una OCM que sigue incentivando las plantaciones y que prima la cantidad frente a la calidad.
2. incrementar la demanda. Para ello UPA apuesta firmemente por realizar campañas de promoción con dotaciones presupuestarias importantes. La forma que entendemos de desarrollar esta propuesta es a través de la creación de la interprofesional del aceite de oliva que represente a todos los intereses del sector.
UPA