Nota de UPA
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) y la Plataforma Avícola Estatal (PAE), han calificado de rotundo éxito la primera jornada de paro general indefinido y el cierre de las granjas de pollos en las principales zonas de producción de España. Según los primeros datos recogidos por el comité de seguimiento, el 90 % de los productores de pollos han secundado el paro y el cierre de granjas. UPA y la PAE han confirmado la ausencia de incidentes dignos de mención pero quieren denunciar los chantajes y amenazas de algunas empresas a productores y granjeros de pollos que están siguiendo el paro general y que han decidido cerrar sus granjas y no admitir nuevas camadas de pollos para engordar, tal y como se decidió mayoritariamente.
Según cálculos estimados por UPA y la PAE, las grandes empresas integradoras pueden perder cada día de huelga 1,32 millones de euros, ya que dejarán de producirse 2 millones de pollos diarios, 3.600 toneladas de pienso y dejarán de incubarse 2 millones de huevos al día.
La decisión de fuerza tomada por UPA y la PAE se produce tras romper las negociaciones con la patronal y las grandes empresas integradoras, que se niegan a firmar un contrato tipo homologado, como se establece en otro sectores productivos. Los empresarios del sector del pollo pretenden seguir manteniendo unas relaciones económicas «feudales» con los granjeros, lo que está provocando una crisis sin precedentes y el cierre de cientos de granjas familiares.
El paro general que se ha iniciado hoy se mantendrá mientras las grandes empresas integradoras no firmen el contrato tipo homologado con los productores de pollos de todo el estado, lo que originará el desabastecimiento de este producto de consumo en los mercados a corto plazo. La negativa de la patronal a firmar el contrato tipo homologado tiene como objetivo fundamental dejar fuera del mercado a las pequeñas empresas integradoras lo que beneficiaría a la empresa SADA que incrementaría notablemente su cuota de mercado alcanzando niveles prácticamente de monopolio.
UPA y la PAE quieren denunciar también que en los últimos meses se han acentuado una serie de problemas que están provocando una de las peores crisis en el sector. Así cuando las cotizaciones en lonja siguen una tendencia al alza con precios muy elevados, las liquidaciones efectuadas a los avicultores integrados están en niveles más bajos a los registrados antes del Acuerdo Marco. Por ofrecer un ejemplo, mientras que los productores de pollos reciben 0,11 euros por kilo por parte de las empresas integradoras, los consumidores pagan 2,5 euros por kilo, lo que representa unas márgenes comerciales claramente abusivos y refleja unos niveles de «usura» por parte de los empresarios que para UPA y la PAE podrían constituir un presunto delito económico perseguible de oficio por los tribunales de justicia.
Según el informe elaborado por UPA y la PAE las pérdidas durante el 2002 ascenderán a 34,7 millones de euros, lo que se traduce en una pérdida de renta por explotación de casi 7.000 euros. El sector productor de pollos en España cuenta con 5.000 explotaciones avícolas que generan 37.500 puestos de trabajo. En España se sacrifican una media de más de 660 millones de pollos al año, con una producción de 1,4 millones de toneladas de carne, lo que representa el 13,5% de la Unión Europea y una facturación de 1.200 millones de euros.
UPA