Nota de prensa de UPA
La Comisión Ejecutiva Federal de UPA, en su última reunión, ha acordado iniciar, de acuerdo con su ordenamiento estatutario, los trámites necesarios para proceder a la expulsión del afiliado de UPA-Almería, Inocencio Arias, embajador de España ante la ONU, por su entusiasta actividad en el ataque y posterior invasión y ocupación de Iraq. Esta decisión es excepcional, en la vida organizativa de UPA, pero está plenamente justificada aunque sólo sea como muestra de solidaridad con las víctimas de la guerra.
En este sentido, el secretario general de UPA, Fernando Moraleda, ha remitido hoy una carta al diplomático español, comunicándole esta decisión. En ella Moraleda le comenta que «su responsabilidad política como máximo representante del Gobierno español ante la ONU, su proyección muy destacada ante la opinión pública por su popularidad y los sucesivos destinos diplomáticos que ha ocupado; y, sobre todo, sus más recientes declaraciones públicas mostrándose como un entusiasta partidario del ataque a Irak, han suscitado un amplio debate en la Comisión Ejecutiva Federal de UPA, cuyas conclusiones me veo obligado a trasladarle con el máximo respeto y consideración.»
» Como usted seguramente conoce, -continúa el secretario general- por haber confiado en nosotros, UPA es una organización agraria progresista, integrada en la Unión General de Trabajadores (UGT), y cuya posición ante la guerra de Irak está liderando, junto a otras organizaciones sindicales y políticas, la respuesta de la inmensa mayoría de los españoles rechazando tanto el ataque a Irak como, especialmente, la incompresible postura del Gobierno español en este conflicto».
Fernando Moraleda esgrime razones éticas y morales y afirma que «en UPA, al igual que en la conciencia de más del 90% de los españoles, creemos que esta guerra es injusta, ilegítima e ilegal. En UPA somos partidarios de la fuerza de la razón y no de la razón de la fuerza, cuyas consecuencias siempre son negativas para todos, incluidos aquellos que se apoyan en el poderío militar y la soberbia. Pero, sobre todo, nos llena de indignación cada vez que vemos a las víctimas civiles directas de los bombardeos y los ataques.»
» Lógicamente, -continúa el secretario general- desde UPA no se ha intentado jamás conocer, controlar o valorar las creencias ideológicas, políticas, religiosas o de cualquier otra índole de nuestros más de 83.000 afiliados y afiliadas. Aunque estamos convencidos de que todos ellos han llegado a esta organización conociendo y asumiendo su talante democrático, progresista, defensor de la vida y de la paz.»
» La responsabilidad- concluye en su carta Fernando Moraleda- que supone representar al colectivo mayoritario del campo español hace que nos resulte muy difícil compartir ahora nuestro trabajo sindical –cuyo único objetivo es mejorar las condiciones de la agricultura familiar– con personajes públicos tan significados como usted y que con tanta vehemencia han defendido y defienden la barbarie que se está cometiendo en Irak, con el apoyo incondicional de nuestro Gobierno».
Esta carta ha sido enviada hoy a Inocencio Arias, al Ministerio de Asuntos Exteriores y a su domicilio en la provincia de Almería, donde está afiliado a UPA desde el año 2000, por ser titular de una explotación de cereales.
UPA