La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha rechazado el acuerdo marco para la EEB presentado por el Ministerio en la noche de ayer. El citado acuerdo se sustenta en la existencia de una Orden Ministerial que «aseguraría» que los costes de destrucción de harinas cárnicas serán sufragados por el consumidor final y no por los ganaderos. Un análisis de la norma, junto con las distintas declaraciones realizadas en la reunión, hacen que esta organización plantee serias dudas sobre sus efectos, dado que la Orden Ministerial asegura una correcta trazabilidad de las harinas cárnicas, que permitirá conocer donde se generan y donde se almacenan; pero no un seguimiento de quien asume los costes de las mismas.
UPA considera que con la clara indefinición del texto, es posible que los costes de harinas acaben siendo sufragados por el consumidor y también por el ganadero. Esta razón y la amenaza del sector industrial de no comprometerse a repercutir los costes de los Materiales Específicos de Riesgo ( MER) que ya están pagando los ganaderos, si no sólo a analizarlos han sido las razones básicas para que la organización no asuma este acuerdo.
Para UPA, ante la ausencia de una norma jurídica clara y contundente se imponen varios escenarios, por un lado se trata de confiar en la buena intención de la industria a la hora de repercutir costes hacia la distribución, buena intención que ya han demostrado desoyendo la petición del Ministerio de no aplicar costes de harinas a los ganaderos hasta el día 18; por otra parte, una amplia representación del sector industrial se ha negado a asumir el acuerdo marco presentado, declarando que ante la falta de garantías para repercutir los costes a la distribución, van a continuar cobrando a los ganaderos.
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos considera impresentable por parte de la Administración Española el haber llegado a este punto, en el que por la obsesión del déficit cero y de no responsabilizarse con presupuesto público de un grave problema de sanidad humana se ha generado una situación en la que se solicita al sector productor la confianza en la industria y la distribución, al tiempo que se nos pide que firmemos un acuerdo que sólo garantiza el seguimiento de las harinas cárnicas, pero no su correcta eliminación por falta de las infraestructuras públicas necesarias. Por otra parte, la pérdida de renta soportada por los ganaderos al tener que pagar el coste de MER en matadero es incluida en el acuerdo como aspecto secundario, tratada como no prioritaria y sin visos de solución.
El Acuerdo Marco, presentado por el Ministerio de Agricultura, y asumido por distintos segmentos de la industria cárnica sólo corresponsabiliza a los firmantes de la mala gestión realizada por la Administración Española en el tema de la EEB. La promulgación de la Orden Ministerial tendrá como efecto la trazabilidad de los desechos cárnicos, pero no su correcto tratamiento ni tampoco la exención de los ganaderos del coste de las mismas.
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos realizará un seguimiento al acuerdo, que de aplicarse correctamente debería tener efectos inmediatos en el mercado y denunciará las irregularidades del mismo. Los consumidores y los ganaderos españoles no pueden ser los rehenes y pagadores de una mala gestión del Gobierno, ya que no hemos generado el problema y no podemos asumir una mala solución del mismo.
Si desde UPA se confirma la inutilidad de estos acuerdos, convocará una gran movilización de ganaderos a la que invitará al resto de organizaciones no firmantes y no descarta iniciar acciones de carácter jurídico y administrativo contra las medidas adoptadas por el MAPA.
UPA