Nota de prensa de UPA
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) está liderando la respuesta del colectivo mayoritario del sector agrario español, en defensa del Régimen Especial Agrario de la Seguridad Social (REASS), frente a las pretensiones del Gobierno de iniciar un proceso de reformas sucesivas que conduzcan progresivamente a su desaparición. Una amenaza que los sucesivos Gobiernos del Partido Popular vienen esgrimiendo desde 1996, que se incorporó al pacto sobre el futuro de las pensiones firmado en 2001 por el Gobierno con la CEOE y Comisiones Obreras, y que ahora se ha querido colar con secretismo y sin consultar con las organizaciones del sector, enmascarado en el lote de medidas económicas aprobadas por Real Decreto Ley.
Nada más conocerse esta medida, una vez publicada en el BOE el pasado 26 de abril –porque las referencias informativas tras el Consejo de Ministros no recogían ninguna mención al respecto–, la respuesta de UPA fue inmediata: el REASS es un derecho irrenunciable de los profesionales de la agricultura y la ganadería en España, un colectivo de cerca de 400.000 hombres y mujeres, trabajadores autónomos, titulares de pequeñas y medianas explotaciones agrarias, cuya realidad social y económica sigue estando alejada de otros sectores laborales y cuyas rentas no pueden verse recortadas por un aumento de cotizaciones a la Seguridad Social. Este colectivo incidiría, como titulares o arrendatarios de las explotaciones, en un grupo socialmente afectado cercano al millón de personas.
La defensa del REASS es, en consecuencia, un objetivo sindical de primera magnitud para UPA. La reacción inmediata de la organización, solicitando una reunión urgente con el Secretario de Estado de Seguridad Social, ha conseguido incorporar cambios tanto en la forma como en el fondo: las modificaciones publicadas en el BOE se van a someter a tramitación parlamentaria con la consiguiente posibilidad de enmiendas, y el Gobierno ha admitido ya suavizar las subidas iniciales de cotizaciones, mediante una “fe de erratas” publicada en el BOE el 6 de mayo.
Pero, evidentemente, no es suficiente. La amenaza sobre el futuro del REASS no ha desaparecido. Sólo un rechazo firme y unánime del colectivo afectado por esta amenaza será capaz de frenar este proceso. Por ello, UPA ha convocado una concentración urgente el próximo 22 de mayo, ante la sede del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, en Madrid, en la que varios miles de agricultores y ganaderos demostrarán hasta qué punto el REASS se considera un derecho irrenunciable.
La reforma aprobada por el Gobierno. Una puerta abierta hacia la desaparición
El contenido relativo al REASS, incluido en el Real Decreto-Ley publicado en el BOE el pasado 25 de abril, bajo el epígrafe global de “medidas de reforma económica”, pretende abrir una puerta que conduzca irreversiblemente a la desaparición de este régimen especial de la Seguridad Social. Los aspectos concretos más relevantes son los siguientes:
· Se aprueba el inicio del proceso para la equiparación del REASS por cuenta propia con el Régimen Especial de Autónomos (RETA), con unos coeficientes de aumento de cotización desde 2004 hasta 2018.
· La cotización de los trabajadores por cuenta propia del Régimen Especial Agrario, a partir del 1 de enero de 2004, por contingencias comunes pasa a ser de 111,88 euros (18.615 pesetas) a 122,71 euros (20.416 pesetas), lo que supone un incremento de 10,83 euros (1.801 pesetas. Para el año 2018 pasa de 147,63 euros (24.564 pesetas) a ser de 245,40 euros (40.832 pesetas) (ver Anexo I).
· El artículo octavo del Título III, relativo a la ampliación de la protección por incapacidad temporal para los trabajadores por cuenta propia o autónomos, hace extensiva esta ampliación a los trabajadores acogidos al REASS. Naciendo la prestación económica por incapacidad temporal a partir del cuarto día de la baja en la correspondiente actividad. La disposición final primera, relativa a la cotización adicional por la ampliación de la protección por incapacidad temporal, modifica el tipo de cotización en el Régimen Especial Agrario para los trabajadores por cuenta propia que se hayan acogido a dicha protección, pasando del 2,7 por 100 actual al 4,35 por 100 (ver Anexo II). Es decir, la “mejora” supone un incremento en la cotización, durante el ejercicio 2004, de 16,59 euros mensuales (2.761 pesetas) y en 2018 de 19,03 euros (3.165 pesetas) (ver Anexo II).
· Pero, además, serán los médicos de las Mutuas los que puedan proponer directamente el alta médica, lo que conlleva la pérdida de la prestación económica, aun cuando el agricultor permanezca de baja por prescripción de su médico de cabecera.
· El total del recibo mensual agrario será de 155.41€ (25.858 pesetas) mensuales para enero de 2004 y de 285.69€ (47.536 pesetas) mensuales en 2018. En resumen, el incremento de las cotizaciones será de 329.04€ (54.748 pesetas) en el año 2004 a 1401.60€ (233.207 pesetas) en el 2018.
· A partir de la entrada en vigor de este Real Decreto-Ley se permite la inclusión de la mujer mediante un requisito sin reglamentar como es “el replanteamiento del medio fundamental de vida”. Ambigüedad en la inclusión de la mujer que contrasta con la concreción en el incremento real de las cotizaciones.
· En su artículo sexto, se hace referencia a la exoneración de cuotas de la Seguridad Social a los trabajadores por cuenta propia con 65 o más años, siempre y cuando se tenga como requisito haber cotizado al menos durante 35 años.
“ Fe de erratas”, once días después
Tras la presión de UPA, el 7 de mayo se publica en el B.O.E un epígrafe que bajo el título fe de erratas al RD-Ley de medidas de reforma económica, se recogen el siguiente punto:
· Se rebajan considerablemente los porcentajes de equiparación con el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos los tres primeros años (se minoran los coeficientes de tal forma que la equiparación comenzaría con un aumento mensual el primer año de 11 euros en lugar de los 27,15 previstos).
No a una Seguridad Social que sólo beneficie a los más poderosos
La presión de UPA ha conseguido ya, al menos, frenar el ímpetu liquidador y la prepotencia del Gobierno, pero el objetivo sigue siendo la progresiva desaparición del REASS y por ello planteamos la movilización del sector, aún coincidiendo con un periodo electoral, porque el rechazo debe ser urgente y contundente. No podemos permitir que un régimen público de seguridad social se convierta en un sistema que da prestaciones sólo a aquellos que puedan económicamente asumirlo. El REASS debe, por consiguiente, continuar existiendo.
Las posiciones que defiende UPA en relación con la reforma del REASS se resumen básicamente en los siguientes puntos:
Negociación frente a imposición
· Rechazo firme a cualquier proceso de reformas sin negociación previa y el consenso de las organizaciones representativas de los agricultores y ganaderos afectados.
Aumento de las prestaciones, no de las cotizaciones
· Denunciar los intentos de aumento de cotizaciones y presión sobre el REASS en un momento de superávit de la Seguridad Social.
· No es justificable una reforma del REASS por cuenta propia basada sólo en el incremento de cotizaciones. Los agricultores y ganaderos españoles siguen teniendo rentas más bajas que las del resto de la Unión Europea y lo que necesitan es el apoyo de la Administración para continuar en el sector. Por ello, reivindicamos la solidaridad entre regímenes, es decir, que el superávit de la Seguridad Social se use para proteger a los colectivos menos favorecidos. ¿Por qué no se amplían las prestaciones sin incrementar las cotizaciones?. No es justificable que un sistema público como la Seguridad Social funcione sólo con criterios de rentabilidad económica.
· Con el sistema de equiparación progresiva del REASS por cuenta propia al RETA lo que se hace es permitir unas cotizaciones más altas (posibilidad que ya existía hasta ahora con el paso al régimen de autónomos).
No a la privatización en las altas por enfermedad
· Las supuestas “mejoras” del “nuevo régimen” son de dudosa aplicabilidad dado que para acogerse a la baja por enfermedad a partir del cuarto día, hay que cotizar más, y el control de altas y bajas lo realizarán directamente las mutuas; y la incapacidad permanente total (con el incremento supuesto) sólo será posible si la persona vende su explotación (en virtud de lo acordado también en el Acuerdo de Pensiones de 2001).
Solidaridad frente a rentabilidad económica
· En la actualidad, la existencia del REASS se justifica por las diferencias con el Régimen General. Merced a su específica financiación, no sólo se justifica la supervivencia del Régimen Especial Agrario sino que se garantiza también la corrección de los desequilibrios entre sectores y colectivos laborales. A través de éste Régimen Especial se hace visible, sin duda, la implantación efectiva al sector agrario del principio de solidaridad nacional, ya que no se reduce esta solidaridad a la del Régimen General, sino que se extiende a la aportación del Estado y a la solidaridad interpensionista de todo el Sistema en materia de revalorización de las pensiones.
· UPA considera que el Gobierno, al equiparar las cotizaciones de los dos regímenes, pretende eliminar progresivamente el actual régimen de cotización para los trabajadores por cuenta propia continuando en la línea de lo establecido en punto VII del Acuerdo de Pensiones (convergencia y simplificación de regímenes) incrementando muy considerablemente el esfuerzo de cotización.
Incorporación real de la mujer frente a propaganda
· Respecto a la inclusión del cónyuge que dedique su actividad predominantemente a la explotación familiar en forma personal y directa, en el Régimen Especial Agrario de la Seguridad Social, UPA cree que debería existir una reducción en la cotización de un segundo titular de una misma explotación agraria.
Incorporación de jóvenes
· Respecto a la exoneración de cuotas de la Seguridad Social para los trabajadores por cuenta propia con sesenta y cinco o más años, UPA considera que con esta medida el Gobierno fomenta el retraso de la jubilación en un sector que, dadas sus características, necesita justo lo contrario: jubilaciones anticipadas para favorecer el relevo generacional con aumentos en la incorporación de jóvenes.
Por último, UPA manifiesta su disposición a mejorar el actual sistema de Seguridad Social Agraria, adaptándola a las circunstancias actuales del sector, pero siempre sobre la base del mantenimiento del Régimen especial.
Nota de prensa de UPA
UPA