Remitido por UPA Sevilla:
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos, UPA-Sevilla, denuncia que la entrada masiva de patatas procedentes de Países Terceros —Egipto e Israel, principalmente— en el mercado comunitario está hundiendo el mercado, y tirando a la baja de las cotizaciones, por debajo incluso de los costes de producción. Así, según explica la Secretaria General de UPA-Sevilla, Dolores Escalona, los agricultores están liquidando sus ventas a tan sólo 10 céntimos (16 pesetas), cuando parten de unos costes de producción de 0,14 céntimos (24 pesetas). La situación de los cultivadores sevillanos es insostenible, a juicio de Escalona, y se produce en una difícil momento, cuando los campos están en pleno rendimiento, tras el parón ocasionada por las heladas.
Asimismo, UPA-Sevilla denuncia que, a pesar de que las cotizaciones en origen están en constante retroceso, y en niveles que no llegan ni siquiera al umbral de rentabilidad, los puntos de distribución y superficies comerciales siguen manteniendo los mismos precios al consumidor, que llega a pagar 0,80 Euros por kilo, lo que representa un incremento cercano al 900%.
UPA-Sevilla exige a las autoridades comunitarias y españolas que intensifiquen los controles en fronteras para evitar que siga entrando de manera masiva y sin control patata barata de Terceros Países y vigile que se cumplen niveles de calidad, persistencia de fitosanitarios y seguridad alimentaria mínima, que sí son exigibles a nuestras producciones. Según apostilla Escalona, los agricultores sevillanos no pueden competir con los salarios de países como Egipto, que son de tan sólo 2 Euros al día, al tiempo que estos cultivadores reciben subvenciones estatales de 100 Euros por tonelada.
De no controlarse urgentemente la entrada masiva y la competencia desleal de Países Terceros, los productores de patata de la provincia de Sevilla se enfrentan a una de las peores campañas de su historia, lo que viene a endurecer la precaria situación de las explotaciones tras las últimas adversidades climáticas sufridas.
UPA Sevilla