La organización agraria ha mostrado en reiteradas ocasiones su total y absoluto apoyo a los agricultores, y ha exigido a los responsables de Puerto de Sevilla que presenten un paquete de medidas que aseguren la ausencia de incidencias sobre las casi 50.000 hectáreas de cultivo de la zona, tal y como han venido repitiendo en contadas ocasiones ante nuestra organización y ante los propios agricultores. La organización exige que antes de llevar a cabo el dragado, se pongan en marcha las infraestructuras que se están estudiando dentro de proyectos alternativos, que persiguen el suministro de agua salubre para los arroceros de la zona.
UPA-Sevilla ha mantenido a lo largo de estos meses una serie de reuniones con responsables del Puerto de Sevilla, agricultores y alcaldes de la zona con la intención de conocer a fondo los proyectos y necesidades de unos y otros. En esos encuentros, los responsables de la organización agraria en Sevilla han expresado su total convicción del importante valor de esta ampliación de la capacidad portuaria de la provincia, aunque siempre que se haga en unas condiciones que no perjudiquen a los cultivos históricos de la comarca del estuario del Guadalquivir –cultivos tradicionales de carácter familiar-.
La ampliación de las instalaciones portuarias contempla el dragado del río Guadalquivir con el objetivo de incrementar la profundidad hasta los ocho metros de calado. Los temores que rodean al dragado se sustentan en el aumento de la salinidad y la bajada de la lámina de agua. Ambas consecuencias perjudicarían sobremanera los actuales arrozales de la comarca.
UPA-Sevilla