Así lo ha expresado el pasado viernes en rueda de prensa el secretario general de UPA-Uce Extremadura, Ignacio Huertas, quien ha calificado de “auténtica barbaridad” la propuesta presentada en pasado día 20 por la Comisión Europea. A su juicio, ésta supone un paso más en el progresivo desmantelamiento de la PAC, además de que no da respuesta a los nuevos problemas del sector: el incremento de los costes de producción y la mayor demanda de alimentos. A su vez, la liberalización va a favorecer aún más la especulación y el problema de los márgenes comerciales.
Desde el punto de vista de UPA-Uce, la “modulación obligatoria” supone un recorte lineal de ayudas que afectará en Extremadura principalmente a las explotaciones familiares (las que cobran entre 5.000 y 100.000 euros), que son las que generan riqueza y empleo en zonas de la región donde no hay otra alternativa. Este recorte supondrá en los próximos cuatro años un importe superior a los 150 millones de euros, según los cálculos de la Organización. Pero a esta cifra hay que sumar la cantidad restada por el Artículo 69, si se decide aplicar por España, que supone un 10% más de recorte a las ayudas, lo que alzaría la cifra final a unos 300 millones de euros menos en ayudas que dejarían de llegar directamente a los agricultores en el periodo 2009-2012. UPA-Uce rechaza este planteamiento que llevaría a la desaparición a muchas de estas explotaciones por falta de rentabilidad.
Otro de los puntos con los que la Organización no está de acuerdo es con optar por una ayuda por igual por hectárea. Este planteamiento sólo se entiende en países donde los rendimientos y las dimensiones de las tierras son parecidos. En cambio, en España la diferencia de los rendimientos y dimensiones entre secano y regadío son abismales.
Tampoco se entiende la desaparición de la intervención de los cereales. La Comisión está mirando hacia otro lado, no quiere ver lo que pasa. Ha habido una gran especulación por la falta de mecanismos de regulación de mercados y ahora la Comisión, en lugar de reforzar estos mecanismos, quiere hacerlos desaparecer.
Por último, la eliminación de la retirada obligatoria significará un aumento de la producción. Sin embargo, debido al aumento de los costes de producción, este efecto será insignificante puesto que no será rentable para los agricultores producir en estas superficies que normalmente son las que menos rendimientos generan.
Ante este planteamiento, UPA-Uce exige un mayor compromiso político y financiero de la Unión Europea con la PAC y el tratamiento de los sectores agrícola y ganadero como sectores estratégicos. Es imprescindible también garantizar la estabilidad de la PAC y reforzar los mecanismos de intervención. Finalmente, la organización pide que se incorpore al documento del chequeo médico la reforma del sector del tabaco para que se puedan mantener las ayudas acopladas a la producción hasta 2013.
Desde la Organización se va a iniciar una campaña informativa con asambleas y jornadas en la mayoría de las localidades extremeñas para explicar a los agricultores y ganaderos la propuesta de Bruselas. Además, continúa la campaña en contra de los abusos en los márgenes comerciales con la recogida de firmas de los ciudadanos que se llevó a cabo este sábado en la Feria Ganadera de Alburquerque.
UPA-UCE