Remitido por UPA:
Después de más de 9 horas de concentración ante el Ministerio de Agricultura de 3.000 apicultores procedentes de las principales zonas de producción, los representantes de las organizaciones agrarias y cooperativas obtuvieron de la Directora General de Ganadería, María Echevarria, el compromiso de solucionar una gran parte de las reivindicaciones de los apicultores para tratar de superar la grave crisis que vienen padeciendo en los últimos meses.
En primer lugar el MAPA se compromete a incorporar la actividad apícola al programa de desarrollo rural y ayudas agroambientales para el periodo 2007/2013. El segundo punto, que hacía referencia a la sequía, la mala climatología y la pérdida de renta como consecuencia de los precios de la miel en el mercado europeo, el MAPA adquirió el compromiso de negociar con el Ministerio de Economía la reducción de módulos IRPF, así como exenciones de la cuota a la Seguridad Social.
El tercer punto es que el Ministerio apostará por la promoción de la miel europea y sobre todo la española como un producto de calidad dirigido a los consumidores frente a la importada de terceros países. Esto se llevará a cabo cuando la Comisión incorpore este producto en el Reglamento de Promoción de Calidad Alimentaria en el ámbito de la Unión Europea.
Con relación a uno de los graves problema del sector que hace referencia a la mortandad de la cabaña apícola, el MAPA no se niega a poner recursos económicos, aunque ha insistido en utilizar los recursos disponibles que se quieren rescatar del Plan Nacional Apícola. Sin embargo, el compromiso del Ministerio es que una vez conocida la información de la mortandad a través de las CCAA, con las que se van a reunir de forma inmediata, las organizaciones y las cooperativas, valorarán y analizarán si son o no suficientes los recursos apícolas del Plan. UPA considera que son insuficientes y exigirá una dotación presupuestaria especial para afrontar este problema.
Otro de los problemas que el sector considera fundamental es el de los controles en la frontera que se realizan a otras mieles procedentes de terceros países y que en muchas ocasiones las organizaciones agrarias hemos reiterado como de muy baja calidad. En este sentido, María Echevarría ha instado a la Agencia Española de Seguridad Alimentaria a que se reúna con el sector y que lleve a cabo la creación de una Comisión de Seguimiento, aunque la decisión final tiene que ser tomada por el Ministerio de Sanidad. En cualquier caso UPA va a exigir la intervención urgente de este Ministerio y si este se niega solicitará la intervención de la Vicepresidencia del Gobierno.
UPA valora también que la apicultura forme parte de la mesa de sequía donde están representados todos los sectores ganaderos, se va a ejecutar un observatorio de precios de las mieles así como, y de manera “prioritaria”, desarrollar el Plan Nacional contra la Varroa.
María Echevarría Echevarría va a tener una reunión con los directores generales de las comunidades autónomas para concretar la puesta en marcha del Plan. También tiene previsto abrir una línea de investigación de cuáles son las causas de la mortandad y los problemas sanitarios de las abejas; para ello se llevará a cabo un convenio con al menos dos centros técnicos apícolas en España que inicien un proyecto de investigación que permita afrontar este problema.
UPA valora el compromiso y la actitud de la Directora General pero considera que de momento son sólo son compromisos y no realidades ya que quedan muchos temas por solucionar como el mercado, los precios y, el más preocupante que es el de la calidad, de la que es responsable la Agencia Española de Seguridad Alimentaria.
Por último UPA quiere mostrar su rechazo absoluto a la postura de prepotencia adoptada por altos cargos del Ministerio de Agricultura que durante varias horas se negaron a recibir a los representantes de los apicultores, en una actuación sin precedentes en las movilizaciones agrarias que se han producido desde hace muchos años. UPA considera un insulto y una falta de respeto y consideración hacia los 3.000 apicultores (de los 5.500 que existen en España) concentrado ante el MAPA, que habían pasado muchas horas sin dormir viajando en los autobuses desde distintas partes de España, con el único objetivo de ser recibidos y escuchados por parte del Gobierno.
UPA