la calidad de los cítricos amparados en la Comunidad Valenciana.
Este organismo se encarga de certificar y divulgar de forma imparcial, la calidad de los mejores cítricos producidos y comercializados desde la Comunidad Valenciana, a partir de la regulación de todo el proceso productivo.
Para ello, se establecen unos requisitos de calidad que se deben cumplir no sólo en las plantas de confección sino en todo el proceso, desde que se recoge el fruto en el árbol hasta que es comercializado. Además de las labores de certificación, la IGP “Cítricos valencianos” también se dedica a promocionar la marca mediante la asistencia a actos, ferias, la divulgación de información en los medios, o la creación de merchandising.
– Ya hace más de seis años de su creación pero, ¿cómo surge la idea de crear este organismo?
– Los más de 200 años de comercialización de cítricos en la Comunidad Valenciana avalan la reputación de la naranja, la mandarina y el limón de la zona, y aunque los consumidores ya reconocían esta virtud, era necesario crear una institución que reconociese esa calidad y asumiese el reto de mantenerla y asegurarla. Pero en cualquier caso, fueron varios sectores relacionados con los cítricos los que de forma unánime convinieron la creación del Consejo Regulador.
Representantes del comercio privado, las organizaciones agrarias, el sector cooperativo y la propia administración, fueron los que unieron sus esfuerzos para poder crear esta entidad, convirtiéndose así en los valedores de este organismo.
De hecho, actualmente la IGP “Cítricos Valencianos” está compuesta por representantes de los sectores mencionados. Gracias a la labor de estos colectivos, la IGP “Cítricos Valencianos” nace en 1999 como el organismo oficial que ampara la calidad de los cítricos valencianos.
Desde entonces, su trabajo ha ido adquiriendo mayor relevancia, y aunque desde un principio obtuvo el reconocimiento a nivel nacional, nuestra figura de calidad se ha ido extendiendo hasta el ámbito europeo pues en mayo de 2003 la Unión Europea reconoció nuestra marca y entramos en el “Registro de Denominaciones de Origen Protegidas y de Indicaciones Geográficas Protegidas”.
– ¿Cómo es su funcionamiento interno?
– Hay tres áreas básicas dentro de nuestro organismo: Disponemos de un área administrativa que se encarga de los registros de los productores, las parcelas y el control económico y de un departamento de comunicación y marketing orientado a la promoción externa de la marca.
Pero además, ofrecemos un servicio de certificación que garantiza el cumplimiento de los requisitos de calidad establecidos y para hacerlo de un modo imparcial, subcontratamos las visitas de inspección a una entidad tercera totalmente independiente que es quien emite un juicio acerca de los procesos productivos y la calidad del producto de la entidad inspeccionada.
Todo ello es coordinado por un gerente que ejecuta las directrices marcadas por el órgano de gobierno que es el pleno del Consejo Regulador, encabezado por su presidente.
– ¿Cree que ha sido importante la creación de la IGP “Cítricos Valencianos? ¿Por qué?
– Puesto que la producción de cítricos es desde hace mucho tiempo base de la economía valenciana y que, supone casi el 70% de la producción nacional, creo que era necesario crear un organismo que, como ocurre con otros productos como los vinos, regulase el proceso productivo para garantizar así unos mínimos de calidad, y sobre todo, potenciase la comercialización de la mandarina, la naranja y el limón valenciano.
Por esta razón ha sido muy importante la creación de la IGP “Cítricos Valencianos”, pues cumple una función imprescindible en el sector, sobre todo en esta época en la que los mercados globalizados son cada vez más competitivos, y en los que el consumidor es cada vez más exigente.
– ¿Cuáles han sido las actividades promocionales más importantes de 2005/2006?
– Con tal de poder competir con otros países que ofrecen menos calidad pero precios más ajustados, creemos necesario el reconocimiento de nuestra marca en el exterior de ahí que durante esta campaña estemos orientando nuestros esfuerzos comunicativos a la promoción externa en los grandes eventos europeos relacionados con el sector.
Por estas razones nuestras actividades promocionales se centran en las grandes ferias. Un ejemplo de esta labor sería la presencia de la IGP Cítricos Valencianos en ANUGA, una de las ferias de alimentación más importantes de Europa que tuvo lugar en Colonia del 8 al 12 de Octubre.
El mes de noviembre fue muy activo en cuanto a la proyección de nuestra marca pues, nos reunimos con otros Productores de indicaciones geográficas (IGs) procedentes de más de treinta países de todo el mundo en Hangzhou (China) para celebrar la segunda Asamblea General de OriGIn, una red internacional de productos de indicaciones geográficas a la que pertenecemos junto a otros productos como el turrón de Jijona, la Chufa etc. Pero además, para acabar el mes, también iniciamos una campaña de promoción de los cítricos, en los centros del grupo El Corte Ingles, tanto en tiendas El Corte Ingles, Hipercor como Supercor, una campaña que tuvo una gran acogida en la Comunidad Valenciana, región donde se desarrollaba por vez primera.
En enero también estuvimos presentes en varios eventos de relevancia como en la Feria de la Tecnología Agraria del Mediterráneo, que se celebró en Alicante del 19 a 22, acto al que acudimos desde su primera edición hace cuatro años, con la finalidad de acerca al sector primario la información necesaria sobre las funciones y los objetivos que desempeña el Consejo Regulador en la citricultura valenciana
Además este mismo mes también nos desplazamos hasta Alemania para presentar nuestra marca en el mercado mayorista de Munich, uno de los más destacados de la zona. En febrero nuestra promoción también se orientó al mercado exterior, de ahí que a principios de mes llevásemos nuestros cítricos a centros mayoristas de distintas zonas de Francia, además de estar presentes en una de las ferias más destacadas y cuya asistencia es casi obligada año tras año, Fruit Logística en Berlín, un evento de gran impacto internacional.
Aunque hasta el momento las actividades promocionales se han centrado en presentar nuestra marca de calidad en el mercado exterior, también hemos realizado otro tipo de labor a nivel local, apoyando muchas iniciativas como los desayunos saludables organizados en colegios de la Comunidad Valenciana por FUVAMA.
– ¿Tiene previsto poner en marcha algún proyecto en un futuro inmediato?
– Tenemos previsto dos grandes proyectos para este nuevo periodo que superarán si cabe lo realizado anteriormente. Por un lado y puesto que en el V Encuentro Mundial de las Familias, que se celebrará del 7 al 9 de Julio, está prevista la participación de millón y medio de personas, los consejos reguladores ya se han reunido para ir preparando su aportación en este acto multitudinario.
En este sentido, la IGP “Cítricos Valencianos” también quiere aprovechar la oportunidad única que supone este encuentro, para dar a conocer la marca que ampara, con lo que, participará en diversas actividades todavía por confirmar.
Por otro lado, y también en colaboración con otros consejos reguladores, estaremos presentes en la Copa América, concretamente realizaremos diversos actos durante las regatas de la Copa Louis Vuitton que se celebrarán en Valencia desde el 4 de Mayo al 25 de Junio de 2006. La gran afluencia de visitantes, deportistas, medios de comunicación y personas de relevancia internacional, hace imprescindible la participación de los Consejos Reguladores mediante diversas actividades programadas como visitas a bodegas, almacenes, explotaciones agrícolas, museos de los diferentes productos, etc, así como degustaciones, exposiciones e incluso una cena con Sabor Mediterráneo.
Creemos que estas jornadas van a ser el escaparate idóneo para promocionar los productos autóctonos y en especial, la naranja, la mandarina y el limón.
-Toda la actividad promocional ha podido suponer un cambio en la visión que se tenía de los cítricos valencianos, ¿cree que ha influido positivamente en la comercialización o el consumo de éstos?
– Siempre es algo positivo que un producto, sea cual sea, esté apoyado y regulado por una organismo imparcial que garantice el sabor, el color y la calidad que de otro modo, sería difícil de asegurar. Las connotaciones positivas que transmite la marca de calidad otorgan al consumidor una tranquilidad a la hora de la compra que no se obtiene en los productos que no cuentan con el amparo de este organismo.
La seguridad de encontrar en una pieza de fruta los rasgos que el consumidor busca como el aroma y el buen sabor, no está asegurada con la compra de cítricos no amparados por nuestra marca y esto el consumidor lo sabe. El consumidor es exigente y quiere un fruto que cumpla con las expectativas de calidad que él tiene, algo que sólo se asegura comprando cítricos amparados por un organismo oficial.
En general, el consumidor de cítricos valencianos valora ese género que sabe que no va a defraudar sus expectativas de sabor, aroma, etc. En ese sentido, las actividades promocionales juegan un papel muy destacado pues permiten acercar nuestra marca al consumidor en los puestos de venta de centros detallistas, ferias o grandes almacenes.
Es fundamental que el consumidor reconozca la marca y la asocie con esas connotaciones que pretendemos transmitir, y eso sólo lo podemos conseguir con la promoción. Si para el consumidor eres un desconocido posiblemente no depositará confianza en la marca, pero si por el contrario la presencia de la IGP se hace constante y además es avalada por el dueño del establecimiento, el consumidor no duda en probar los cítricos valencianos.
Con las campañas que desarrollamos no sólo buscamos un acercamiento de nuestra marca al consumidor, sino que además intentamos transmitir a largo plazo una forma de vida más saludable, una dieta equilibrada con la ingesta de cítricos, y nos esforzamos por impulsar la comercialización de éstos destacando siempre las virtudes que tienen para la salud.
Creo que todo ello ha influido positivamente en la comercialización de los cítricos en la Comunidad Valenciana y sobre todo, estamos potenciando de este modo el consumo de la mandarina, la naranja y el limón de la zona, lo que es muy beneficioso para todos.
– ¿Considera que el consumidor español reconoce ya este valor de calidad?
– En 2004 encargamos a una empresa externa un estudio de mercado para poder averiguar cuál era el impacto de la marca en los consumidores y si después de tantos años, éstos distinguían nuestro valor de calidad. La verdad es que las conclusiones fueron reveladoras. Todas las personas que fueron entrevistadas coincidieron en la importancia y buenas perspectivas de esta marca de calidad, e incluso estaban dispuestos a pagar un precio más alto si alguna organización externa como la nuestra, certifica el origen y la calidad del producto.
Sin embargo el consumidor final reveló que apenas conocía el Consejo Regulador IGP “Cítricos Valencianos”, lo cual evidencia una falta de notoriedad en este público. Sin embargo, no ocurría lo mismo en otros públicos como los almacenes de confección, mayoristas y detallistas, pues éstos conocían bien la marca.
Conociendo estos resultados, nuestros esfuerzos se han centrado en conseguir una mayor notoriedad en el comprador, que es quien consume los cítricos de la Comunidad Valenciana, y creo que poco a poco hay una mayor presencia de marca y un mayor reconocimiento.
De hecho, nuestra presencia en actos y eventos de gran relevancia internacional y nacional ha ido aumentando en estos años con la intención de conseguir un mayor reconocimiento, y creo que lo estamos consiguiendo pues cada vez un mayor número de personas reconoce nuestra calidad.
– ¿Pueden estas campañas haber ayudado también a mejorar la reputación de la citricultura valenciana?
– La demostración constante de la calidad de nuestros cítricos hace que el consumidor final inmediatamente después de probarlos, los asocie con una serie de rasgos positivos y que, inconscientemente vaya adoptando una actitud favorable hacia los cítricos valencianos, lo que supone una ventaja para la comercialización de este sector.
En definitiva, creo que nuestras actividades no sólo mejoran la reputación de la naranja, la mandarina y el limón valenciano, sino de la Comunidad en sí misma.
– Pero según tenemos entendido, la labor de la IGP no sólo se orienta a promocionar la calidad de las mandarinas, naranjas y limones valencianos, sino también a exigirla ¿qué mecanismos se tienen para preservar la calidad de la fruta? ¿Qué baremos defiende la IGP?
– En las acciones promocionales de la IGP “Cítricos Valencianos”, se informa al consumidor final de que esta denominación supone una garantía de calidad, y para que esto sea una realidad apreciable se realiza toda una actividad de control y seguimiento que tiene como principal objetivo verificar que se cumplen todos los requisitos exigidos por este Consejo Regulador, es el llamado servicio de certificación: Los controles de calidad abarcan tanto las inspecciones en campo, como las realizadas en almacenes de acondicionamiento y envasado y en los puntos de venta.
Se llevan a cabo visitas a las parcelas inscritas con tal de comprobar la variedad y sanidad de la plantación y estimar la potencialidad productiva que tiene, de forma que la información obtenida se puede contrastar “a posteriori” con la cantidad declarada por el operador en su aprovisionamiento.
En la inspección en centros de acondicionamiento y envasado, un inspector con la ayuda de un laboratorio portátil, verifica requisitos tanto de calidad externa (defectos, forma, color, calibre, envasado y etiquetado, presentación) como de calidad interna (porcentaje de zumo, índice de madurez, ausencia de semillas y el “come bien”).
Después se encarga de verificar una serie de requisitos de proceso que debe cumplir la empresa visitada, que son: custodia de marca, la trazabilidad, aspectos relacionados con la seguridad alimentaria, controles de las producciones y gestión de las reclamaciones. La inspección en el punto de venta es similar a la anterior y de lo que se trata es de verificar el buen comportamiento del producto amparado tras las etapas de distribución y manipulación en el mercado.
– Dentro de lo que se considera cítricos de calidad, la IGP autoriza la comercialización de unas variedades concretas, ¿Se ha aceptado alguna nueva durante esta última campaña?
– Las variedades de cítricos autorizadas por la IGP son una total de 34, entre las 18 variedades de mandarinas, 5 híbridos entre los que se encuentra la “Ellendale” o la “Fortune”, 9 tipos de naranjas y 2 de limones, el “Fino” y el “Verna” Esta temporada se han añadido a lista dos variedades de mandarina, la “Capola” (Mioro) cuyo periodo de maduración coincide con la “Marisol” y la “Clemenrubí” que es un poco más temprana.
– ¿Qué tipo de almacén de confección suele estar interesado en obtener este certificado?
– En principio no hay un almacén prototipo, cualquiera puede entrar en el proceso de regulación, siempre y cuando se cumplan los requisitos de calidad establecidos por al IGP “Cítricos Valencianos” No importa si es un almacén pequeño o grande, con más o menos automatización, lo importante es que cumplan los mínimos exigidos para formar parte de nuestro equipo y mantenga esa voluntad campaña tras campaña.
– Desde su experiencia, ¿Cuáles cree que son los principales retos a los que tiene que enfrentarse el sector citrícola valenciano para mantener su competitividad en el ámbito global?
– En estas últimas campañas se están viviendo momentos difíciles, por una parte hay elementos comunes a otros sectores como es la aparición de la globalización de la economía y la concentración de la demanda. Y por otra parte, tenemos serios problemas internos que dificultan aún mas nuestro posicionamiento en los mercados mundiales.
Un handicap estructural en la producción es el predominio del minifundio en las parcelas productivas de la Comunidad Valenciana lo que hace que nuestros costes productivos sean más elevados que otras zonas productoras, no sólo extranjeras como Grecia, Turquía, Egipto, Marruecos y el entorno de Sudáfrica y Sudamérica en el cono sur, sino también nacionales como Andalucía.
Este es uno de los principales retos que tiene que superar nuestro sector, pero hay otros relacionados con ello, pues en estos países productores de cítricos además de contar con estructuras productivas más rentables por sus extensiones y mecanización, cuentan con una mano de obra más barata. Otra de las grandes cuestiones a superar en el mundo citrícola valenciano es la inadaptación de nuestras estructuras comerciales al nuevo orden global, en el que imperan las fusiones entre grandes empresas que obviamente, consiguen una mayor cuota de mercado provocando así un desequilibrio pues sólo una de las partes contratantes impone sus condiciones.
También nos falta planificar nuestro espectro varietal ya que, no es rentable concentrar alrededor del 60 % de nuestra producción en dos meses (noviembre y diciembre) cuando contamos con una climatología privilegiada que nos permite producir cítricos hasta finales de mayo. Si además de lo comentado, el mercado es incapaz de absorber el aumento de la producción derivado de la entrada en producción de nuevas parcelas o de la regeneración de parcelas atacadas por el virus de la tristeza que había que replantar, podemos afirmar que el panorama no variará si no tomamos medidas estructurales tanto en el ámbito productivo como en el comercial que nos permitan competir con más fuerza en el mercado global.
De momento, y hasta que solucionemos las cuestiones negativas que entorpecen la producción citrícola a escala internacional, creemos que la calidad de nuestros cítricos es el aval fundamental y diferenciador en estos momentos de crisis. Sólo con un producto de calidad nos posicionaremos en un nicho de mercado que el consumidor habitual de cítricos valora y desde la IGP Cítricos Valencianos vamos a continuar centrando nuestros esfuerzos por ganarnos la confianza de los consumidores con un producto certificado que garantiza unos estándares elevados de calidad externa y a nivel organoléptico.
– Con la ampliación de la UE ¿cree que el sector se verá beneficiado o por el contrario se encontrará con una mayor competencia?
– Por una parte vamos a tener un mercado mayor con más oportunidades de venta pues se prevé un aumento en el poder adquisitivo de los países de nueva adhesión y un mayor número de acuerdos comerciales, pero sin embargo, el desarrollo de estas economías se sostendrá con las ayudas que la UE les ofrece y que irán destinadas fundamentalmente a la agricultura, apoyo que no aumentará sus cifras lo que, repercutirá negativamente en el campo español.
En cuanto a Turquía, que es un país productor, creo que nos va a perjudicar su entrada a la UE porque desaparecerán las barreras arancelarias que compensaban sus menores costes de producción y entrarán en nuestros mercados en las mismas condiciones comerciales que nosotros, aunque con las ayudas de la PAC nuestras diferencias de costes de producción serán mayores.
En definitiva, creo que la UE debe regular muy bien las ayudas para que no haya desequilibrios entre los mercados y desigualdades en la capacidad productiva. De hecho, incluso creo necesario la creación de un seguro que ampare a los agricultores y les garantice una renta mínima para poder sobrevivir, y más en estos momentos en que la caída de los precios, el aumento de la competencia y las rentas cada vez más bajas está llevando a una situación insostenible.
Aunque la globalización de la economía puede suponer una gran oportunidad comercial, también puede empeorar la situación en el campo en general, poniendo en peligro, no sólo a la propia producción sino también a toda la red de trabajadores que viven de un modo u otro del sector agrícola. No hay que olvidar que el agricultor es el eslabón base de todo un proceso muy complejo en el que participan muchos agentes, con lo que es necesario cuidar el primer escalón para poder conseguir resultados positivos a nivel global.
– En cualquier caso, ¿hay en algún mercado externo en el que los cítricos valencianos tienen más éxito? ¿Por qué?
– Los mercados donde mejor se valora a los cítricos amparados por la IGP “Cítricos Valencianos “son el francés y el italiano, prueba de esta buena aceptación es que son los países donde con mayor frecuencia realizamos promociones en mercados mayoristas.
En Francia por ejemplo, contamos con la inestimable colaboración de Anecoop, cooperativa de segundo grado, que pone a nuestra disposición su red comercial y sus proveedores (cooperativas productoras).
Para consolidar nuestra marca de calidad en el mercado francófono, realizamos promociones en establecimientos de venta al público por toda su geografía y durante toda la campaña de cítricos, todo ello con resultados sorprendentes. Estas promociones se llevan a cabo en cuatro cadenas de establecimientos: Leclerc, System-U, Match y Monoprix. En segundo plano aunque con menor intensidad, tenemos Bélgica, Alemania e Inglaterra como países en los que también se está asentando nuestra marca.
En cualquier caso, la IGP “Cítricos Valencianos” no pone barreras y esperamos en un futuro poder ampliar nuestra área de actuación a otros países