La Agricultura orgánica. ¿Por qué hacer agricultura orgánica? La agricultura moderna intensiva enfrenta dos graves cuestiones. EN PRIMER LUGAR, provoca una contaminación del suelo y las capas de agua debido al uso de abonos químicos y pesticidas.
Además, estos productos causan un deterioro de la estructura del suelo al disminuir su carga bacteriana. Esto lleva a emplear maquinaria agrícola cada vez mas pesada para roturar las tierras dañadas, con lo que el problema se incrementa y se crea un circulo vicioso.
Por otra parte, el monocultivo, la hibridación y la ingeniería genética disminuyen la biodiversidad biológica, aumentan la dependencia económica de los países periféricos respecto a los centrales y provoca éxodo rural y desempleo.
EN SEGUNDO LUGAR. La agricultura moderna interfiere en la calidad de los alimentos mediante la presencia de tóxicos en la alimentación y la ausencia de ciertos nutrientes por causa de una fertilización deficiente.
Las empresas que fabrican estos productos y las reglamentaciones que facilitan su uso, sostienen que la presencia de estos químicos en las plantas es baja y tolerables por el organismo, o que se trata de sustancias que se degradan rápidamente en el medio ambiente. Esto no es real. Y hay cientos de ejemplos que contradicen los argumentos «tranquilizadores» de las multinacionales químicas. Unos de los más contundentes es el caso de los organoclorados.
Claude Aubert, del Instituto Nacional de Agronomía de Francia, cuenta que en ese pais se realizo hace unos años un estudio cuyos resultados espantaron a las autoridades y a la opinión publica: EL TENOR DE ORGANOCLORADOS EN LA LECHE MATERNA ERA DE VEINTE A CINCUENTA VECES SUPERIOR AL DE LA LECHE VACUNA. Esto no es sorprendente, dado que, como una mujer se encuentra en el final de la cadena alimentaria, los pesticidas que ella va acumulando son eliminados a través de la leche en una cantidad mas concentrada. Esto fue una constatación que, entre otras, llevaron a la prohibición de los organoclorados en Europa. Se desarrollaron a continuación biocidas de segunda generación, los organofosforados.
Se creía, que, debido a que estos se degradan en pocos días, el problema estaba solucionado. Sin embargo, no tuvieron en cuenta que estos pesticidas se transforman en productos de degradación, de cuyos efectos, hay un total desconocimiento. LOS ABONOS QUÍMICOS INDUSTRIALES, COMO EL NITRÓGENO,SODIO Y POSTASIO,DESEQUILIBRAN EL SUELO DESDE EL PUNTO DE VISTA MINERAL, IONIZÁNDOLO DE UNA MANERA EXAGERADA.
Estos iones penetran por osmosis, dada su alta solubilidad: la planta los absorbe en mayor proporción de la que necesita, y se desequilibra. Por ejemplo, la proporción de nitrato de la hoja de espinaca sin abono nitrogenado es de 23 partes por millón. Con un abonado de 30 kg. De nitrógeno por hectárea, pasa a contener 420 PARTES POR MILLON ¡!! Esto es inconveniente para la salud del consumidor, pues los nitratos en un medio reductor
El exceso de potasio en el suelo inhibe la asimilación de minerales vitalizantes como el magnesio, el fósforo y la mayor parte de los oligoelementos.La disminución del magnesio en las plantas que consumimos disminuye las defensas del organismo y favorece la aparición de enfermedades graves. LA FERTILIZACION BASADA EN MATERIAS ORGANICAS Y MINERALES NATURES MOLIDOS, QUE CONSTITUYE EL FUNDAMENTO DEL METODO DE LA AGRICULTURA ORGANICA, ES LA UNICA QUE PUEDE ASEGURAR A LAS PLANTAS, Y POR CONSIGUIENTE, AL HOMBRE, UN SUMINISTRO NORMAL DE LOS OLIGOELEMENTOS NECESARIOS. La agricultura orgánica se propone, frente a este panorama dilemático e incierto, como una técnica sostenible y económica a la vez. Esta basado en la fertilización orgánica viva y en la lucha indirecta, no violenta contra los parásitos y en colaboración permanente con la naturaleza. Este método tiene muy en cuenta el medio ambiente(como el uso de cercos vivos que aumenta la fertilidad de la tierra creando un microclima favorable) y emplea un conjunto de prácticas como ser el uso de abonos verdes, LOMBRICOMPUESTOS,COMPOSTS y sus combinaciones
Rotaciones, uso de cultivos alternados o plantas compañeras.
EL LEMA ES. SI EL SUELO ESTA SANO, TAMBIEN LO ESTARAN LAS PLANTAS Y LOS SERES QUE SE ALIMENTEN DE ELLAS.
En 1970, Borlaug, el padre de la revolución verde, fue galardonado con el premio Nobel de la Paz, por su contribución a la selección de cereales apropiados para la producción intensiva.
La propuesta era tomar lo que servia del patrimonio genético de un vegetal, trivializando el resto, y por ende, empobreciendo nuestra relación biológica con el medio ambiente.
Esta síntesis científica es propia de una concepción reduccionista que despoja a los recursos naturales o culturales de sus variables singulares justificando el despojo con argumentos utilitarios o altruistas. Con la promesa de un mundo sin hambre, se inundo el mercado mundial con cereales híbridos de alta producción, ADICTOS A DOSIS CRECIENTES DE FERTILIZANTES
E INSECTICIDAS SINTÉTICOS.
Hoy hay una situación real que no podemos desconocer: todo este sistema de producción y distribución esta basado en un recurso no renovable: el petróleo. Como la tendencia es el agotamiento de esta fuente de energética, tenemos que decidir que sistema de producción elegiremos, o bien nos inclinamos por utopías tecnológicas, o bien ADOPTAMOS UN ESTILO DE VIDA COMPATIBLE CON EL APROVECHAMIENTO INTEGRAL Y SOSTENIBLE DE LA NATURALEZA.
Un indicador de que esto ultimo es posible, es el informe del Departamento de Agricultura de los E.E.U.U. que estima que 100.000 del 2.1 millones de granjeros están haciendo agricultura sin productos químicos, o están a punto de eliminarlo y este numero va creciendo rápidamente.
A qué obedece este cambio? ¿es otra vez una moda?
¿es una corriente filosófica?
¿es una variación en los gustos del mercado consumidor?
Hugo Castello, biólogo destacado de la comunidad científica argentina, explica este cambio por la transformación de la conciencia del consumidor, que demanda productos sanos. Esto es cierto, pero no termina de explicar la base profunda del cambio: los gustos y preferencias del consumidor no modelan automáticamente la oferta del mercado.
La respuesta es sin duda económica: la clave sigue siendo el petróleo. Con petróleo se hacen insecticidas, fungicidas, herbicidas, fertilizantes y la mecánica de tractores, riego y transporte. A esto hay que agregarle la molienda, la cadena de frío y/o sistemas de conservación y envasado. Y como el petróleo es cada vez mas costoso, el sistema economico internacional