El consejero de Agricultura y Medio Ambiente de Castilla-La Mancha, Alejandro Alonso, manifestó ayer que Castilla-La Mancha ha propuesto que la Unión Europea establezca ayudas a la producción de mosto, así como que se mantenga la fiscalidad o tasa cero para el vino y se realice una política europea más agresiva a favor del vino. Estas propuestas han sido realizadas en la X Asamblea Plenaria de la Asociación de Regiones Vitícolas Europeas (AREV) y han sido incluidas en la resolución aprobada por la unanimidad de sus miembros.
Alonso, que ocupa una vicepresidencia en la AREV, manifestó la preocupación que existe en el sector vitícola europeo y en las administraciones de las regiones vitícolas europeas ante la situación actual.
“Se está produciendo una alarmante disminución del consumo de vino en las regiones productoras, al tiempo que se están incrementando las importaciones de este producto procedentes de terceros países (Chile, Sudáfrica, Argentina, Australia, etc.)” señaló el consejero, quien agregó que “se está experimentando una pérdida de competitividad del vino europeo”.
En la resolución aprobada por la AREV, tras tres días de intensos debates, se apuesta por la necesidad de realizar una política europea más agresiva a favor del vino.
Alonso criticó los acuerdos preferenciales de la Unión Europea con países terceros como Sudáfrica o Chile y los calificó como “intolerables”, ya que van a abocar al sector vitícola europeo a una crisis permanente y, en el caso de Castilla-La Mancha, “son absolutamente negativos para el futuro del principal sector económico de nuestra región”.
Asimismo la AREV, en la resolución aprobada, exige a la Unión Europea el mantenimiento de la tasa cero aplicada al vino y, al contrario, se mostró favorable a una reducción progresiva de los impuestos del vino en los países europeos consumidores, con el fin de frenar la bajada constante del consumo de este producto y lograr así el equilibrio de los mercados.
En este sentido, Alonso manifestó que “no puedo entender como el Gobierno de España no ha amenazado ya con vetar esta cuestión” y añadió que “en este asunto, es necesario un posicionamiento más activo, tanto del sector como de todas las administraciones de los países y regiones productoras”.
A juicio de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente de Castilla-La Mancha, la aplicación de modificaciones fiscales, tal y como está proponiendo la Dirección General de Fiscalidad y Unión Aduanera, tendría una incidencia absolutamente negativa sobre la producción, comercialización y el consumo de vino.
Asimismo y tal como ha explicado Alejandro Alonso en numerosas ocasiones, el vino no puede tener la consideración que otras bebidas alcohólicas, dado que el vino es un alimento tradicional en la dieta mediterránea y su consumo moderado es beneficioso para la salud.
Por otra parte, Castilla-La Mancha propuso, y así se ha reflejado en la resolución de la AREV, el establecimiento por parte de la Unión Europea de medidas y ayudas para la producción de mosto, de forma que sea un producto competitivo en la industria agroalimentaria.
Finalmente, el consejero de Agricultura y Medio Ambiente señaló que “sería necesario y bueno que el Parlamento español tome posiciones en estas cuestiones que afectan al sector vitivinícola, dado que el Gobierno español no está criticando y manifestando su enérgica oposición a asuntos como la posible fiscalidad del vino o los acuerdos preferenciales con terceros países”.
JCCM